Quedan exactos 10 días para que los magistrados de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya hagan sonar el martillo en el caso de la demanda marítima de Bolivia a Chile. Entre medio, los presidentes de ambos países coincidirán en Nueva York, en el marco de la 73ª Asamblea General de la ONU, aunque es poco probable que entablen un contacto directo.
Esto pues Evo Morales tiene en agenda su intervención para el miércoles 26 de septiembre a las 19:00 mientras que Sebastián Piñera hará lo propio al día siguiente.
Si bien el canciller boliviano, Diego Pary, es posible que el mandatario andino haga referencia al conflicto del mar, el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Ampuero, evitó comentar si la intervención de Piñera responderá a lo que Morales pueda decir.
«Nos tiene muy acostumbrados a anuncios a cada rato, muy contradictorios por la demás», indicó Ampuero tras reunirse en La Moneda con el Jefe de Estado y el agente chileno Claudio Grossman.
Declaraciones
Más temprano, el canciller hizo una declaración acusando un «viraje» de parte de Morales en su discurso, indicando que este pasaba de ser agresivo a más conciliador, en busca del diálogo.
«Pareciera que mejor aconsejado, ahora, el presidente Evo Morales está preparando el terreno para un fallo que no le dará lo que le prometió a su pueblo para ir a La Haya: territorio soberano chileno», indicó.
Algo que es respaldado por Edgardo Riveros, analista internacional y académico de la U.Central. «Es clarísimo que Evo Morales ha generado expectativas en Bolivia que no pueden ser satisfechas», precisó a Publimetro.
«Evo ha tenido una conducta errática, no cabe duda, por lo mismo nuestra atención debe estar en no caer en ese juego», advirtió el profesor.
Agenda
Hasta antes del 25 de septiembre, cuando Piñera viajará a EEUU para ir a la ONU, intentará comunicarse con los partidos para alinear al mundo político tras la entrega de los resultados.
Su regreso a suelo chileno está previsto para el sábado 29 y el lunes 1 de octubre esperará la lectura del fallo en La Moneda.
«No viajará La Haya, lo haremos como lo hicimos ya durante los alegatos orales», indicó el canciller Ampuero.
Él, por su parte, esperará en Holanda el fallo de la CIJ junto a Grossman y apenas tengan los documentos, volarán a Santiago a informar al Mandatario.
