Al mediodía de este jueves se realizará, en la iglesia institucional de Carabineros, la misa fúnebre en memoria del cabo primero Óscar Eduardo Galindo Saravia, quien falleció tras ser baleado en la cabeza en La Pintana.
Luego del responso, a la que asistirán las más altas autoridades civiles y policiales del país, los restos del cabo Galindo serán trasladados a la ciudad de Cañete, de donde era oriundo, para su sepultación.
El fallecido uniformado tenía 29 años de edad y 11 de servicio, y dejó una familia compuesta por su esposa, la cabo primero de Carabineros Priscilla Lavanderos Hernández, y tres hijos.
Óscar Eduardo Galindo Saravia ejercía en la 41ª comisaría de La Pintana. Se trataba del único carabinero de su familia.
«Siempre con una tremenda sonrisa ayudando a sus compañeros y dispuesto a entregar lo mejor de sí en cada uno de sus servicios. Deja una familia, una esposa e hijos que lo esperaban», lo recordó Carabineros.