El partido venezolano Primero Justicia (PJ), del opositor Henrique Capriles, aseguró hoy que ha logrado relegitimarse con casi 200.000 apoyos obtenidos este fin de semana.
Los apoyos recabados corresponen a un proceso obligatorio de revalidación de militancia convocado por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
«Hemos llegado a las casi 200.000 personas que han validado en los 23 estados de Venezuela y en el Distrito Capital», dijo en rueda de prensa Capriles, dos veces candidato presidencial y gobernador del estado de Miranda, en el centro del país.
El dirigente opositor afirmó que, aunque PJ «validó en todo el país», se enfrentó a un proceso lleno de obstáculos y arbitrariedades, en alusión a retrasos en varias entidades que elevaron el promedio del tiempo de validación por persona.
Capriles señaló que en algunos casos sus simpatizantes hicieron colas durante cinco horas y no pudieron sumar su apoyo al partido debido, entre otras cosas, al insuficiente número de puntos habilitados por el CNE (poco más de 400).
En este sentido, estimó que cerca de 20.000 personas no lograron pasar por las máquinas captahuellas y denunció que en los estados de Carabobo (centro) y de Nueva Esparta (este) estos dispositivos se reiniciaron varias veces, retardando el flujo de electores.
Explicó que en la entidad que él gobierna PJ alcanzó cerca de 20.000 respaldos pese a contar con «tres máquinas menos» respecto al fin de semana pasado, cuando validaron otras organizaciones, entre ellas Voluntad Popular (VP), el partido creado por el opositor encarcelado Leopoldo López.
El gobernador de Miranda criticó casos como el del municipio caraqueño de Baruta que, pese a contar con unos 300.000 electores, solo dispuso de una máquina captahuellas para el operativo, o el caso de Nueva Esparta donde, afirmó, el director regional del CNE aplicó «operación morrocoy (tortuga)».
Respecto a esta entidad insular, remarcó que el tiempo de validación por persona fue de diez minutos, superior a la media nacional de 120 segundos, y dijo que pese a ello superaron la meta de recolección establecida en un 16 %.
Adelantó que en el estado occidental del Táchira PJ consiguió un 276 % de sus objetivos, en el de Amazonas (sur) el 129 %, en el de Carabobo (centro) un 102 % y en el también central de Lara el 92 %, aunque esperan informes finales que podrían acercarlo al 100 %.
El excandidato presidencial indicó que carecen de los datos de algunas localidades por fallos en la transmisión y repudió las situaciones de violencia registradas, según dijo, en el municipio caraqueño de Libertador, gobernado por el chavista Jorge Rodríguez.
«Hubo situaciones con grupos paramilitares, que dicen que son grupos sociales, eso es un paramilitarismo que ha organizado el Gobierno nacional, son grupos que actúan al margen de la ley», expresó sin dar más detalles, aunque aclaró que no hubo heridos ni daños durante la jornada.
El político opositor reiteró sus críticas al Poder Electoral y a sus «decisiones inexplicables» de posponer aún más la convocatoria para las elecciones de gobernadores, una votación que debía haberse concretado en diciembre pasado y que fue suspendida hasta «finales de semestre», en este año, aunque hasta ahora no se ha publicado el cronograma electoral.
Además, Capriles culpó al presidente del país, Nicolás Maduro, de los obstáculos que debió sortear PJ en su afán de revalidarse, y aseguró que el Gobierno pretende afectar a este partido -que cuenta con el mayor número de diputados opositores en el Parlamento- porque «sabe el tamaño que tiene».
«Hemos batido récord en participación (…) hace rato dejamos de ser un partido regional (…) este partido es una institución, no es de ninguno de los que estamos parados aquí, esta es una casa, un proyecto colectivo», sostuvo.
A juicio del dirigente opositor venezolano, la llamada revolución bolivariana atraviesa su «etapa final» y el siguiente paso en Venezuela debería ser una convocatoria de elecciones.
Para evitar que se inicie un proceso de cancelación de la organización política, los partidos que no participaron en los últimos comicios o que obtuvieron menos votos del equivalente al uno por ciento del padrón, deben lograr un respaldo de al menos el 0,5 % de los electores en por lo menos doce estados de los 24 del país.
Además de PJ, otras seis organizaciones políticas estaban llamadas a validar sus nóminas este fin de semana, aunque Gente Emergente, una formación contraria a Maduro, decidió no participar al considerarlo una «nueva trampa con el propósito de exterminar a todos los partidos».