El gobierno de Nicolás Maduro liberó la madrugada de este sábado, en víspera de Año Nuevo, a seis opositores presos, entre ellos el excandidato presidencial Manuel Rosales, que estaba bajo arresto domiciliario desde el 19 de octubre.
«He sido puesto en libertad junto a otros presos políticos. Seguimos en la lucha por la liberación de todos», escribió en Twitter el dirigente, que había sido detenido en octubre de 2015 tras regresar al país luego de seis años de exilio.
Rosales, de 64 años y quien enfrentó al líder socialista Hugo Chávez en los comicios de 2006, había sido imputado en 2008 por enriquecimiento ilícito cuando fue gobernador de Zulia en dos periodos (2000-2008). Fue también alcalde de la ciudad de Maracaibo y diputado.
Enrique Márquez, presidente de Un Nuevo Tiempo (fundado por Rosales), dijo a la AFP que la excarcelación del exgobernador de Zulia (oeste) y de los otros opositores se conversaron en la mesa del diálogo con el gobierno, instalado en octubre pasado.
«Es resultado de estos esfuerzos. Su libertad es buen augurio para el resto de los presos políticos», afirmó Márquez.
Alfredo Romero, director de la ONG Foro Penal Venezolano, confirmó que, además de Rosales, fueron excarcelados otros cinco opositores presos que su organización defiende.
«Esperábamos las liberaciones, luego de conversaciones con la Nunciatura y la Embajada de España. Salieron Skarlyn Duarte, Yeimi Varela, Nixon Leal, Angel Contreras y Gerardo Carrero», precisó Romero a través de la red Periscope.
Todos, menos Rosales, fueron detenidos en 2014 durante las protestas que exigían la salida de Maduro del poder. Estaban recluidos en la sede del servicio de inteligencia (Sebin) en Caracas.
Romero exigió al gobierno liberar a todos los «presos políticos» y frenar la detención de opositores, pues asegura que solo este año 55 fueron puestos tras las rejas.
«De 109 presos políticos (en total), liberaron a seis, quedan 103. Seguimos esperando que en el transcurso del día se liberen más personas», agregó el director de Foro Penal.
El diálogo que inició el 30 octubre entre el gobierno y la oposición -auspiciado por el Vaticano y la Unasur-, quedó congelado en diciembre luego de que los adversarios de Maduro denunciaran que el Ejecutivo no ha cumplido lo pactado.
Entre sus principales exigencias está justamente la liberación de opositores presos y la solución electoral a la crisis del país.
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