El Reino Unido celebra este jueves elecciones regionales y municipales en las que podría entronar al primer alcalde musulmán de Londres, Sadiq Khan, y reforzar la apuesta de los nacionalistas escoceses por un segundo referéndum de independencia.
Los colegios electorales abrieron a las 07H00 (06H00 GMT) y estarán abiertos hasta las 22H00 para elegir los parlamentos de Irlanda del Norte, Gales y Escocia y 124 concejos municipales.
La alcaldía de Londres es la joya de la corona de estas elecciones, pese a ser un cargo simbólico que, eso sí, sirve de trampolín a quien lo ostenta, como puede acreditar el alcalde saliente, el conservador Boris Johnson.
Los dos candidatos con opciones son el conservador Zac Goldsmith, hijo de un multimillonario, y el hijo de un conductor de autobús de Pakistán, el laborista Sadiq Khan, 45 años, que llevaba doce puntos de ventaja en los últimos sondeos.
Unos 5,6 millones de londinenses están llamados a las urnas.
Goldsmith y el primer ministro David Cameron han insistido en presentar a Khan como alguien con vínculos con extremistas musulmanes, una estrategia que podría volverse en su contra.
«Khan es claramente un musulmán moderno y progresista. Si sus oponentes se aventuran demasiado en este terreno, corren el riesgo de topar con una reacción enérgica», estimó Tony Travers, profesor de la London School of Economics.
En declaraciones a la AFP, Khan denunció la campaña «divisiva y desesperada» de los conservadores.
«Soy londinense, soy británico, soy de fe islámica, y me enorgullezco de ser musulmán. Soy de origen asiático, paquistaní. Soy un padre, soy un marido, soy un sufridor hincha del Liverpool desde hace tiempo. Soy todas estas cosas», explicó.
«Pero lo mejor de esta ciudad es que puedes ser un londinense de cualquier confesión o de ninguna, y aquí hacemos algo más que tolerarnos: nos respetamos, nos recibimos con los brazos abiertos», concluyó.
Si gana, se convertiría en el primer alcalde musulmán, no solo de la cosmopolita capital británica, sino también de una gran capital europea.
– Crucial para Cameron y Corbyn-
Los londinenses están muy preocupados por la vivienda, cara e inadecuada, y por la saturación del transporte público.
Son problemas cada vez más acuciantes debido a que Londres atrae como un imán a banqueros, trabajadores de la construcción o estudiantes, y ha ganado 900.000 habitantes desde la elección de Boris Johnson en 2008, para pasar a 8,6 millones.
En este sentido, los londinenses parecen tener más fe en Sadiq Khan, también para lidiar con la contaminación y la seguridad.
Pero además, la cercanía con el referéndum sobre la pertenencia del Reino Unido a la Unión Europea, el 23 de junio, hará que las elecciones regionales y municipales sean examinadas de cerca en busca de pistas.
Los resultados afectarán la credibilidad de David Cameron, que está haciendo campaña para continuar en la UE. Y van a ser cruciales para el líder de la oposición laborista Jeremy Corbyn, según los analistas.
La elección en septiembre de este izquierdista de pura cepa sigue cuestionada por parte del aparato laborista, que le ve incapaz de conducir al partido a la victoria en las elecciones generales de 2020 y quiere que se vaya cuanto antes.
Unos malos resultados en las elecciones de este jueves podrían propiciar un golpe contra él.
– El SNP busca su tercera victoria consecutiva en Escocia –
En Escocia, uno de sus antiguos bastiones, el laborismo podría encontrarse en la posición humillante de ser superado por los conservadores como segunda fuerza del parlamento regional.
El Partido Nacional Escocés (SNP, independencia), que gobierna en esta región desde 2011, espera mejorar los 69 escaños (de 129) obtenidos en 2011, que ya fueron un gran progreso respecto a los 47 de 2007.
El alcance de las elecciones de este año supera el ámbito local: renovando el mandato del SNP, los votantes reforzarían sus ambiciones secesionistas, especialmente si los británicos optan por abandonar la Unión Europea en un referéndum sobre el tema previsto para el 23 de junio.
«Creemos que el parlamento de Escocia debe tener el derecho de organizar otro referéndum (…) si hay un cambio significativo respecto al contexto que prevalecía en 2014, como que Escocia sea retirada de la la UE en contra de su voluntad», afirma el programa del SNP.
En Gales, el laborismo podría verse perjudicado por el ascenso del partido antieuropeo UKIP, que podría cosechar sus primeros escaños en una asamblea regional, según los analistas.
En Irlanda del Norte, donde el gobierno se forma con una coalición de unionistas protestantes y nacionalistas católicos, el Partido Democrático del Ulster (DUP) aparece por delante del Sinn Fein en los últimos sondeos.
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