El hallazgo de “anomalías térmicas impresionantes” en una fachada de la pirámide de Keops, en Egipto, resucita la esperanza de dilucidar los misterios de la última de las siete maravillas del mundo antiguo todavía en pie, como por ejemplo si alberga cámaras secretas.
El tráiler del proyecto “Scan Pyramids” muestra cámaras térmicas infrarrojas que colorean la pirámide de Guiza de amarillo a rojo oscuro, e imágenes de las construcciones majestuosas de piedra grabadas por drones. Promete descubrimientos gracias a la combinación de las ciencias exactas y la egiptología.
Todo ello con la esperanza de responder al enigma de las pirámides, uno de los más fascinantes de la Antigüedad.
Este proyecto lanzado a finales de octubre utiliza cámaras infrarrojas, un método no invasivo y no destructor, para cartografiar, sin un arañazo, el corazón de las pirámides de Guiza, unos monumentos funerarios de más de cuatro mil años.
Las mismas cámaras se usaron a comienzo de noviembre para sondear la tumba de Tutankamón en Luxor con el objetivo de ver si es fiable la teoría de arqueólogo británico Nicholas Reeves que apunta a que la legendaria reina Nefertiti está enterrada en su interior en una cámara secreta.
Con el escaneo de las pirámides, los científicos esperan detectar “la presencia de pasillos y cámaras desconocidos”, o incluso rastros de rampas que permitan dilucidar el enigma de su construcción.
– Una aventura larga –
El ministro de Antigüedades egipcio, Mahmud Eldamaty, adelanta que la aventura será larga. “Tenemos que hacer todavía más hallazgos sobre las pirámides”, declaró entusiasmado en rueda de prensa el lunes al pie de la pirámide de Keops, el monumento de piedras construido por el Hombre, hace 4.500 años.
Aprovechando la ocasión, el ministro reveló los resultados preliminares del proyecto “Scan Pyramids” lanzado el 25 de octubre. Un equipo de científicos egipcios, franceses, canadienses y japoneses observaron ya anomalías térmicas “impresionantes” sobre el flanco este de la pirámide de Keops, cerca del suelo, y otras menos flagrantes a media altura.
Algunos bloques de piedras presentan una diferencia de temperatura de hasta 6 grados Celsius con respecto a otros situados a su lado. En las imágenes se ven colores cálidos, del rojo al amarillo, que contrastan con los tonos del resto del monumento, entre el azul y el rojo oscuro, tirando a morado, señal de frío.
“Esta imagen es la más importante del año 2015”, afirmó el ministro al presentar la “Gran Pirámide” engalanada de colores.
– Un tesoro fabuloso –
Esta diferencia de temperatura indica cavidades o al menos corrientes de aire, dando pie a una multitud de interpretaciones que se irán analizando antes de final de 2016.
Scan Pyramids probó en noviembre sus cámaras infrarrojas en la tumba del faraón Tutankamón, y la diferencia de temperatura en uno de los muros confirmó la hipótesis de Nicholas Reeves y Eldamaty: la existencia de una cámara secreta. Todavía no se sabe de quién.
Nicholas Reeves cree que es la de Nefertiti, una reina de belleza legendaria. Hace 3.300 años fue la esposa principal de Akenatón, el padre de Tutankamón, el único faraón con una sepultura intacta, hallada en 1922. Todas las demás fueron saqueadas a lo largo de los milenios.
Su tumba contenía 5.000 piezas, en su mayoría de oro, un tesoro entre el que destaca la célebre máscara de oro macizo y piedras preciosas.
Egipto esconde todavía mil y un enigmas, algunos de los cuales podrían descifrarse, según los expertos, gracias a la unión de las nuevas tecnologías y las ciencias exactas.
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