Bastante expectación ha causado una lista de apellidos de ascendencia sefardí (judíos-hispanos) que circula en internet respecto del proyecto español para otorgar la nacionalidad a miles de esos descendientes, y que incluiría a varios apellidos muy comunes en nuestro país.
No obstante, fuentes oficiales de la embajada de España en Chile consultadas por Publimetro señalaron que sólo se trata de un “anteproyecto de ley a ser estudiado en el congreso español”, y que “el listado no es de carácter oficial, ni ha sido emitido por ningún ministerio” ibérico.
“Las listas de apellidos que supuestamente podrían ser beneficiarios de esta modificación legislativa, difundidas en las últimas semanas en redes sociales, no han sido elaboradas por ninguna institución oficial española ni tienen relevancia ninguna a efectos oficiales”, aclaró la embajada.
Por su parte, el chileno Mario Matus, autor del libro “Tradición y Adaptación. Vivencias de los Sefaradíes en Chile” (1993), llamó a no hacerse falsas esperanzas “porque la persona que sabe que viene de familia judía probablemente debe tener algún tipo de evidencia familiar”.
Un poco de historia
“Los sefardíes (o sefaradíes) son aquellos judíos que en algún momento después de la destrucción del templo de Herodes el año 70 d.C., llegaron por distintas vías a España… En 1391 hubo una oleada de matanzas, donde los que no fueron confinados se tuvieron que convertir forzados al cristianismo”, añade Matus.
El también académico del Centro de Estudios Judaícos de la Universidad de Chile, advierte que a esta lista no se le debe dar mayor asidero, pues “la mayor parte de los que se convirtieron adoptaron apellidos castellanos, catalanes, gallegos o vascos” y porque “es imposible saberlo, salvo que la familia haya guardado registros, que efectivamente desciende de una rama safardí”.
Acá “los apellidos que tiene apariencia rara como Namías, Paz, Telias, Colodro o Albala, y que no suenan como castellano, esos probablemente sean sefardíes”, concluye el entendido.
En Chile el gran flujo de sefardíes llegaron entre 1900 y 1930, antes de la Segunda Guerra Mundial.