Universidad Católica estuvo lejos de sus mejores rendimientos y cayó 1-0 ante River Plate de Uruguay, pero aún así clasificó a los cuartos de final de la Copa Sudamericana. La UC tuvo a su favor el triunfo en Montevideo y los dos goles de visita, lo que fue suficiente para avanzar de fase.
Los Cruzados nunca se sintieron cómodos en su propia cancha con un cambio de esquema que buscaba darle más comodidad a Diego Buonanotte en el medio terreno, dejándolo libre y sin tener que hacer las labores defensivas o recostándose a alguna banda. Pero no funcionó y los dirigidos por Ariel Holan no se generaron ningún remate al arco hasta el minuto 85.
Los que sí llegaron a la portería fueron los uruguayos, quienes cerraron bien las líneas en defensa para evitar goles que hicieran más cuesta arriba la tarea y presionaron la salida de los locales. Así fue como ya en el complemento, a los 51′, un error en defensa le permitió a Facundo Bonifazi abrir la cuenta para poner aprietos a los estudiantiles.
Cuando todo se ponía color de hormiga para los franjeados, Sebastián Piriz fue expulsado tras una fuerte falta al «Enano», llevándose la segunda cartulina amarilla y, por consecuencia, la roja. Un respiro que tampoco le permitió a Católica dominar el partido, pero sí aguantar el chaparrón.
De esta forma, gracias a los dos goles como visitante, la UC logró avanzar a cuartos de final, una instancia que no llegaba hace ocho años en torneos internacionales, cuando alcanzó la semifinal ante Sao Paulo en la Sudamericana 2012. Ahora enfrentará a Vélez Sarsfield, que viene de eliminar a Deportivo Cali por un global de 7-1.
El elenco nacional se sumará a Coquimbo Unido entre los ocho mejores de la otra mitad de la gloria, dejando a dos clubes chilenos en instancias finales, aunque pudieron ser tres y con un cupo asegurado en semis, pero Unión La Calera quedó eliminada ante Junior de Barranquilla y no se topará con los Piratas.