En el papel, el modesto Young Boys de Suiza, parecía un rival abordable para el Manchester United. De local, con el Old Trafford lleno y varias estrellas, salvo Alexis Sánchez, el elenco de José Mourinho debería haber ganado con cierta ventaja ante un equipo ciertamente, de menor linaje.
Sin embargo, pasó todo lo contrario. Sin Alexis, y ni siquiera siendo citado, los Diablos Rojos tuvieron que trabajar bastante para doblegar a un corajudo elenco suizo, cuyo gol agónico del belga Marouane Fellaini, les dio vida en la Champions. El panorama era complejo si hubiesen empatado, porque en la fecha siguiente viene el Valencia y de caer ante el elenco ché, los de Mou se iban eliminados.
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Tras el encuentro, Mourinho con algo de tensión en su rostro, respondió las preguntas de la prensa. Una de ellas, fue la ausencia del delantero chileno. Escuetamente, el portugués respondió que «fue por decisión técnica» y no por lesión.
Quien sí se llevo sus elogios fue el portero español, David de Gea, quien tuvo varias paradas salvadoras en el transcurso del partido: «Él es el mejor portero del mundo. Si nuestra ambición es ser los mejores, tenemos que quedarnos con él», indicó.
De todas formas, puso paños fríos a la clasificación a octavos de final de la Champions League y reconoció que les falta subir el nivel: «Estar en octavos es un logro, no un gran logro ni uno fantástico, pero es un logro. Hay mejores equipos que nosotros, equipos con más calidad y ambiciones realistas. Cuando un equipo llega a cuartos de final, todo puede pasar», cerró.
