Apenas 34 días lleva Ivo Basay como entrenador de Palestino. Suficiente tiempo para entrar en la historia del cuadro árabe, ya que, desde la banca, comandó el título del equipo en la Copa Chile, cortando así una sequía de 40 años sin festejar una corona.
Por lo mismo, la celebración fue intensa, pero sin desconectarse de la complicada situación que viven en el Torneo Nacional, donde están buscando zafarse del descenso. «Nos queda una patita para celebrar con todo. Tenemos la oportunidad de depender de nosotros y eso es lo más importante», advirtió Basay.
«Sabemos que desde el lunes tenemos que ponernos las pilas para dejar a Palestino en esta división. Pero esa situación no es transferible a este momento. Salimos campeón después de 40 años. Que los muchachos disfruten porque se lo ganaron, se lo merecen, es un justo premio para ellos. Este triunfo es para toda la colonia», añadió.
Del partido, pese a sacar una rápida ventaja, el duelo se emparejó al final del primer tiempo con dos goles en poco tiempo de Audax. «Sabíamos que se nos iba a complicar, en el segundo tiempo había que tener la calma. El gol del Mago nos ayudó a eso», comentó el Hueso.
Así, con poco tiempo en la tienda de La Cisterna, Basay se mete en la historia de Palestino. «Se dio la posibilidad de tomar al equipo, estaba en semifinales en Copa Chile, pero mal en el torneo. Había que estar un poco loco para tomarlo y, sí, estoy loco«, recalcó.
