La noticia de la automarginación de Claudio Bravo sacudió a la selección chilena. Antes que la ANFP diera a conocer la nómina de la Roja de cara a los amistosos ante Suecia y Dinamarca, en los encuentros que marcarán el inicio de la era de Reinaldo Rueda como técnico, el capitán de Chile, a través de un comunicado publicado en su cuenta de Twitter, decidió restarse de la nómina.
El escrito presentado por el oriundo de Viluco revelaba un problema con el ente rector del fútbol chileno, sobre todo con el presidente Arturo Salah, a quienes acusaba de no haberle cumplido requerimientos que tenía para entrenar al máximo nivel. La petición no cumplida a la que hace referencia fue la frustrada llegada de Julio Rodríguez, quien fuera su formador en Colo Colo, como parte del cuerpo técnico de la selección para cumplir la función de preparador de arquero.
«Llevo muchos años en la selección y siempre trato de estar al máximo, si voy a la selección quiero entrenar y competir al máximo. No es que yo esté imponiendo algo (llegada de Julio Rodríguez) como dice el presidente, es más, yo propuse pagar viajes y sueldos a una persona para que ayude a los arqueros chilenos para que crezcan, no era algo que iba a restar», dijo en conversación con radio La Clave, asegurando, además, que hace más de cuarenta días comunicó que no iría a esta convocatoria y que está dispuesto a volver en un futuro.
«Jamás he impuesto nada, que saquen gente, yo estoy pidiendo si me pueden echar una mano y es si le pueden abrir la puerta a una persona que a mí me va ayudar mucho. Arturo (Salah) estaba de acuerdo y se iba a reunir con él, pero ahora llegaron las negativas. Reinaldo se iba a juntar con Julio y la Federación le dijo que no. Yo le iba a costear el sueldo, pasajes, y era un beneficio», agregó.
«Yo le di mi opinión (a Rueda) que vengo acarreando hace mucho tiempo, de gente que le imponen al cuerpo técnico. Los arqueros modernos trabajamos la mayoría del entrenamiento con el preparador de arqueros y es sólo un tema de pedir ayuda, de necesitar un refuerzo para seguir al máximo nivel. Rueda lo entendió y era un beneficio para que los arqueros más jóvenes sigan creciendo. Hoy Salah dijo que volvíamos a la anarquía y jamás», concluyó.
Además de criticar a la ANFP por la negativa a la llegada de Julio Rodríguez, Bravo también tuvo duros cuestionamientos a las inversiones que se han hecho en el fútbol chileno, asegurando que no existen las condiciones buenas para entrenar ni desarrollarse, otro de los grandes motivos que tuvo para descartarse.