La fiesta del básquetbol llega a su apogeo en Estado Unidos con la gran final de la NBA entre Cleveland Cavaliers y Golden State Warriors que comienza este jueves, con la expectación de los fanáticos de todo el mundo con el duelo entre Lebron James y Stephen Curry como plato estelar.
La concentración es extrema para ambas estrellas, sin embargo, un hecho delictual podría afectar la tranquilidad de los protagonistas. La mañana de este miércoles, la casa en la playa de James amaneció rayada con la palabra «negro», por lo que la policía de la ciudad de Los Ángeles acudió previendo un crimen de odio hacia el jugador y su familia.
El responsable del grafitti desapareció antes de la llegada de los agentes según el informe de Patricia Sandoval, vocera del Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), además de verificarse que el jugador de los Cavs no se encontraba en la vivienda, ubicada en el vecindario de Brentwood, cuando ocurrió el incidente, según informó el sitio TMZ.
La investigación continúa, mientras Lebron se prepara para su séptima final consecutiva de la NBA en su casa en Akron, Ohio y la opinión pública en el país estadounidense repudia el hecho.
El primer juego de la serie, al mejor de siete cotejos, se disputará este jueves en Oakland, donde los Cavaliers intentarán defender su corona obtenida ante los Warriors desde las 21:00 horas de Chile.
