Alavés se clasificó para la final de la Copa del Rey, donde será el rival de FC Barcelona, tras su victoria 1-0 en casa sobre Celta de Vigo (ida: 0-0), este miércoles en la vuelta de las semifinales del ‘torneo del KO’.
En los gallegos jugaron desde el incio Marcelo Díaz y Pablo Hernández. Carepato fue reemplazado a los 83′ por Guidetti, mientras que el ex O’Higgins jugó todo el duelo.
Cuando todo parecía conducir a la prórroga, el equipo vasco consiguió el único tanto del partido en el minuto 82, por medio de Edgar Méndez, que recibió después de que Víctor Camarasa peinara el balón. El jugador canario se deshizo de dos defensores, Hugo Mallo y el argentino Gustavo Cabral, antes de batir al arquero Sergio Álvarez.
Ese fue el único gol de una eliminatoria de 180 minutos, con dos partidos muy equilibrados y con dos equipos muy bien plantados defensivamente, que no lo pusieron fácil en ningún momento.
Alavés, un recién ascendido esta temporada la primera división española, donde va duodécimo, alcanzó la final de la Copa del Rey por primera vez en su historia.
Los hinchas blanquiazules podrán volver a vivir una final como la recordada de 2001 en la Copa de la UEFA, donde brindaron una resistencia memorable antes de caer en la prórroga ante el Liverpool (5-4).
Frente a ellos esta vez estará un Barcelona que ha ganado las dos últimas ediciones de la Copa del Rey y que domina el palmarés con 28 títulos en esa competición.
El equipo catalán se clasificó el martes tras empatar 1-1 con el Atlético de Madrid, al que había derrotado 2 a 1 como visitante en la ida, la pasada semana en el estadio Vicente Calderón.