Amante de la tecnología y uno de los grandes innovadores de nuestro tiempo, Steve Jobs (1955-2011) vivió un antes y un después en su vida el 13 de diciembre de 1980. Y todo, gracias a Apple. En cuestión de horas pasó de ser una empresa en crecimiento a un auténtico gigante entre las compañías de Estados Unidos.
Luego, del mundo.
Es que en esa fecha, exactamente hace 42 años y 2 días, Apple salió a bolsa, cotizando 4.6 millones de acciones en el mercado de valores a 22 dólares por acción.
Fue la IPO (oferta pública inicial) más grande de su tiempo. Una IPO permite que una empresa privada venda sus acciones al público por primera vez, lo que permite a los inversores participar en el desarrollo de la compañía.
Al adquirir una acción de la empresa, como explica el portal Aptki, la persona se convierte en dueño de una pequeña parte de esta, con el beneficio y el riesgo que represente.
Millonarios en cuestión de horas, todos subidos al tren de Apple
En aquel momento, más de 40 de los mil empleados de Apple se convirtieron en millonarios en apenas ocho horas. Como el mayor accionista de la compañía, Steve Jobs terminó ese día con un patrimonio neto de 217 millones de dólares.
Tenía apenas 25 años.
De acuerdo con el portal Cult of Mac, la oferta pública inicial de Apple resultó ser más grande desde la de Ford Motor Company en 1956.
Las acciones de Apple se venderían inicialmente a 14 dólares por acción, suscritas por Morgan Stanley y la firma Hambrecht & Quist. Pero abrieron en 22 dólares, agotándose en cuestión de minutos.
Solo ese día, AAPL subió un 32%, con un valor de cierre de 29 dólares y una valoración total de 1.778 mil millones de dólares.
Steve Jobs, de Apple a la gloria
No obstante, las opciones no podían cobrarse de inmediato, por lo que las personas (Mike Markkula, Steve Wozniak, Arthur Rock, Rod Holt y el mismo Jobs, entre otras) debían esperar hasta que se adquirieran oficialmente.
Mientras, las finanzas subían y bajaban al ritmo del Dow Jones.
Pero los cambios no se hicieron esperar, y mientras un grupo de empleados asalariados recibían opciones sobre acciones, los empleados por horas no calificados no lo hacían, lo que acrecentaba la división.
Los líderes originales de Apple fueron buscando nuevos espacios, incluso Steve Jobs, que dejó la compañía el 12 de diciembre de 1985 para iniciar NeXT, además de invertir en una empresa de gráficos por computadora.
Se llamaba Pixar.
Era el inicio de una historia aún mayor para Steve Jobs.