Fue el pasado lunes 26 de agosto cuando el por eterno capitán de “La Roja” y una de las piezas fundamentales de la bautizada como “Generación Dorada”, Claudio Bravo, anunció su retiro del fútbol profesional.
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Hoy, suena nuevamente, pero no nos referimos a la misma persona. Y es que un hombre, de 55 años, con su mismo nombre y apellido –luego de dos intentos–, en su tercera participación, se convirtió en el flamante ganador del sorteo de automóviles cero kilómetros en Casino Monticello.
Con la misma garra, perseverancia y jerarquía que el exgolero de la Selección Chilena, gracias a la pelotita número 1 de la tómbola, Claudio Bravo logró ganar un Mazda MX5-5.
Frente a esta victoria, el premiado aclaró que “yo juego por diversión y distracción, simplemente para pasar un buen rato, ahora, como buen jugador, cuando me toca jugar, siempre creo que puedo ganar”.
Además, reconoció ser cabalero, por ende, quiso asistir solo el día en que ganó. “Cuando clasifiqué en octubre o noviembre para la ronda previa a la gran final del sorteo (del auto), casualmente vine solo”. Es por esto que no dudó ni un segundo en repetir esta estrategia para la final de a fines de diciembre.
¿Y tendrá alguna inspiración con el exportero de grandes clubes internacionales como Barcelona y Manchester City?: “Nada, en realidad no soy muy bueno para la pelotita. Voy a ver a la selección chilena al estadio, pero si tengo algo entretenido que hacer, hago otra cosa”, confesó el ingeniero de profesión y padre de tres hijos.
No obstante, admitió que llevar el nombre de la exfigura deportiva, pesa. “Adonde voy, cuando se enteran de mi nombre, me empiezan a molestar, ya estoy acostumbrado, llevo como 20 años con esto, desde que Bravo se hizo conocido en Colo-Colo”, detalló.
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“Para que tengas una idea, a uno de mis hijos, todos sus amigos de colegio y universidad lo llaman El Capitán, porque vieron los triunfos de la selección en su época dorada con Claudio Bravo de líder”, contó Claudio al mismo tiempo que le mandaba un registro fotográfico del vehículo a uno de sus hijos que vive en Japón.
Y en relación al futuro del Mazda, todavía no lo tiene claro. “Ya tuve un convertible y tengo un hijo muy pequeño, ¿dónde meto la silla de guagua ahí?”, señaló con humor. “Mis hijos mayores creo que estarían más felices de usarlo”, agregó. Eso sí, dijo que le mandó una foto del auto a su esposa: “Veremos qué dice”.
Por su lado, Manuel Rojas, Gerente General de Casino Monticello, sostuvo que el premio entregado culmina un gran año. “Despedimos el 2024 con un excelente premio y un feliz ganador, constantemente demostramos que somos un casino en el que la gente gana y estoy seguro que vendrán más ganadores aún en Monticello en este 2025, que espero sea muy bueno para todos”, cerró.
