Hace diez años nació Martín Peralta, y lo hizo en la estación del Metro Tobalaba, donde personal del recinto le preparó este miércoles una sorpresa para festejarlo en su cumpleaños.
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Martín nació en la sala de primeros auxilios de la estación y su madre, Marjorie González, fue asistida por personal de Metro luego de que no alcanzara a llegar a la clínica como lo había previsto.
Marjorie tomó el Metro en estación Plaza de Puente Alto para buscar a su hija de once años al colegio y luego ir juntas a la Clínica Tabancura, donde sería atendida luego de que presentara molestias en su embarazo, nunca pensó que las contracciones empezarían mientras aún estaba en el carro. Un guardia que subió en la estación Francisco Bilbao debió escoltarla junto con un pasajero que la calmó hasta la estación Tobalaba, donde paramédicos la esperaban para trasladarla a la enfermería.
El nacimiento de Martín
“Me atendieron tan bien, me sentí tan cálida, tan contenida que no tuve susto, dentro del shock y todo, se me fue el susto. Respiré y nació Martín, fue súper rápido, me sorprendió la preparación que tenían, lo limpiaron, cortaron su cordón, fue muy emocionante”, recuerda Marjorie.
Gladys Vargas fue la jefa de estación que estuvo en el parto y Marly González fue la supervisora en turno, ambas continúan en Metro y apoyaron a los paramédicos durante todo el procedimiento. No quisieron estar ausentes tampoco en esta celebración, donde se reencontraron con el pequeño Martín. Ambas recuerdan ese día con emoción y orgullo de haber podido aplicar los protocolos de atención a pasajeros y ayudado en el nacimiento.
Marly González, que era supervisora de servicios recuerda también “me llevé a la abuelita y a su hija, que estaban acompañando, a otra oficina para que estuvieran tranquilas, las contuvimos. Nació el bebé y cuando ya habíamos cortado el cordón umbilical llegó el SAMU, se coordinó una sonorización para darle la bienvenida a Martín que había nacido recién, la gente aplaudía, no lo podían creer”.
Así llegó al mundo “Tobalín” apodado amorosamente por el personal que lo vio nacer.