La profesora de educación física Alejandra Rodríguez, quien se convirtió en viral tras hacer un potente desahogo respecto a su traumática experiencia haciendo la práctica en un colegio del sector alto de la capital, realizó nuevos descargos sobre esta situación que ha generado impacto y miles de reacciones en redes sociales.
En entrevista con LUN, Rodríguez entregó detalles de la situación en específico que derivó en su desahogo a través de TikTok. “Eran tres cursos y dos profesoras que supervisaban. Ayer, una se enfermó por lo que sólo había una. En un momento la que estaba conmigo salió 30 minutos a hablar con otra profesora afuera del gimnasio y me quedé sola con las 75 niñas. Las niñitas dejaron de escucharme, no me hicieron caso, hacían lo que querían. Yo tratando de solucionar el tema las junté y les empecé a dar un discurso sobre que el respeto. Como soy practicante no puedo evaluarlos ni sacarlos de la clase”, contó.
“Frente a las niñas nunca colapsé, pero cuando salí del gimnasio lloré. Yo estaba súper frustrada, me sentí muy triste, angustiada, tenía impotencia. Subí el video como una forma de desahogarme, sin identificar a nadie, pero llegó al colegio y me despidieron”, continuó.
Frente a estos hechos, la profesora en práctica comentó que “muchos compañeros han sufrido lo mismo y cosas peores que yo en sus prácticas, porque han sido agredidos física y verbalmente. Escuchar ciertas palabras en un niño es tremendo. Quizás lo mío fue más piola, pero reconozco que no estoy capacitada para que me traten así”.
Además, Rodríguez reveló lo que le dijeron en su universidad frente a estos hechos. “Que era normal, que los séptimos básicos son cursos complicados y que teníamos que seguir. Pero yo creo firmemente que la educación principal va en la casa, si tus papás o abuelos no te enseñan a ser respetuoso, no lo serás nunca. Los profesores son muy vulnerables en estos tiempos, no tienen protección”, declaró.
Por todo esto, esta profesora de educación física hizo la siguiente reflexión: “Tengo herramientas para enseñar, pero no para lidiar con malos tratos ni insultos. Claramente aún estoy aprendiendo. Estudié pedagogía por vocación. He tenido otras experiencias muy positivas, pero esto fue un poco tratante. Para mí, que soy deportista y fui seleccionada nacional de esquí, es muy importante el deporte por los volares que enseña y por lo esencial que es para la salud”.
“Después del video recibí muchos mensajes de ánimo. Pero hubo uno que me sorprendió. Me escribieron textual: ‘Sé pesada, trátalas mal, amenázalas’. Uf, no. Yo jamás lo haría, a ningún ser humano, tengo el respeto muy inculcado”, cerró.