El senador Felipe Kast sorprendió a sus seguidores de Instagram tras compartir una foto junto a una consola de DJ y unos audífonos, mientras realizaba la mezcla de una canción, tal como lo hacía en su época escolar según contó a Publimetro. La diferencia, es que ahora “pinchó” en formato Midi y no con casete, como en sus inicios artísticos.
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“Este gusto nace a los 14 años con dos amigos de mi época escolar y fue mi primera fuente de financiamiento. Tocábamos en matrimonios, fiestas de 15 años”, relató el parlamentario sobre su desconocida pasión por animar fiestas al ritmo de la música.
El parlamentario, representante de la Región de La Araucanía, contó que hace un mes retomó lo que fue su pasatiempo de estudiante. tras asistir a un cumpleaños donde se encontraba poniendo música el dj Fernando García A.K.A. Fander, quien se convirtió en su maestro.
“Todos los martes me enseña durante una hora sobre el funcionamiento de las nuevas consolas, ritmos, compases y entrar en forma compasada. Llevamos cuatro clases de 18″, relató respecto a la nueva modalidad para mezclar.
“Cuando yo comencé era con casete, otra época”, señala, quien actualmente tiene mas de 300 vinilos, tocadiscos y tornamesas.
Respecto a sus gustos, confesó que la música de los 80 y 90, como The Rolling Stone, Gustavo Cerati, Peter Gabriel y la salsa llevan la delantera. Aunque, de a poco ha ido incorporando nuevos géneros para ponerse a tono con las preferencias de sus cuatro hijos que lo apoyan y “están felices” con su papá DJ.
Eso, sí, aclara que “no tengo ningún afán profesional, solo me interesa aprender y disfrutarlo. Es más privado”.
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“Sirve para desconectarse”
Además, tras las últimas polémicas que enfrentó el senador, señaló que han sido tiempos “difíciles”, pero la música lo ha ayudado a desconectarse de la contingencia.
“Poner música me ayuda muchísimo a desconectarme. La música es como el deporte, ayuda a desconectarse del mundo y conectarse con la música. Es agradable y bastante terapéutico”, sentenció.
Finalmente, descartó que por el momento vaya a tener un nombre artístico, puesto que sería muy “pretencioso”, pero sí ya compró su primer parlante activo y va en búsqueda de una consola. Todo para deleitar a su familia y amigos para las fiestas de fin de año.