Amaru Carrasco Caniqueo es un niño de 8 años, que al igual que sus padres geólogos, es un aventurero y que desde pequeño tiene grandes intereses como son los dinosaurios, las excursiones y la naturaleza. Sin embargo, desde que fue diagnosticado con hepatitis en marzo de este año, todo cambió para él y su familia. Al no mejorar, le hicieron exámenes y dieron con el diagnóstico de aplasia medular, una enfermedad mortal a la sangre.
“Su vida transcurre en hospitales, cambió sus cuadernos por transfusiones de sangre y plaquetas, ya que su pequeño cuerpo es incapaz de producir glóbulos rojos, ve a sus compañeros por videollamadas ya que cualquier contacto le puede ocasionar infecciones y con ello empeorar su salud”, cuenta Millaray Cariqueo, su mamá.
Como su madre, Amaru tiene ascendencia mapuche. “La compatibilidad está ligada al origen étnico de las personas. En el caso del pequeño Amaru, al tener ascendencia mapuche, mientras más personas pertenecientes a este pueblo originario se registren, mayores serán sus probabilidades de encontrarlo”, señala Ignacia Patillo, Directora Ejecutiva de la Fundación DKMS.
Hoy la única alternativa de sobrevivir para Amaru es con un trasplante de células madre sanguíneas. Al no contar con un donante compatible dentro de su familia, se debe buscar en registros de donantes no emparentados. “Hacemos un llamado a las distintas comunidades indígenas del país a solidarizar con Amaru y con cualquier otro paciente que lo necesite”, recalcan en DKMS.
¿Quién puede ser un potencial donante?
Quienes tengan entre 18 y 55 años, vivan en Chile y cuenten con buena salud, pueden registrarse como potenciales donantes en www.dkms.cl. En caso de ser compatible con Amaru u otro paciente que lo necesite, serán contactados por la Fundación para la donación.