En general y particular fue aprobado por la comisión de Salud del Senado, el proyecto iniciado en moción por los senadores Ximena Ordenes, Paulina Núñez, Juan Luis Castro, Sergio Gahona y Alejandro Kusanovic, que exige a los establecimientos de venta de alimentos entregar agua potable gratuita a sus clientes.
La iniciativa legal forma parte de la agenda prosaludable que impulsa la instancia, donde además se estableció que otras propuestas similares serán refundidas.
En la discusión, se abordaron las bajas cifras de consumo de agua que existe en Chile, principalmente, en algunos segmentos de la población como los adolescentes y adultos mayores. Asimismo, se planteó que el proyecto de ley apunta a frenar el alza de sobrepeso y obesidad que existe entre los chilenos.
El director del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (Inta) de la Universidad de Chile, Francisco Pérez, sostuvo que en 2021, durante la pandemia, el programa Elige Vivir Sano solicitó un estudio a los investigadores del organismo sobre el consumo de agua.
Éste se hizo en 3425 estudiantes de la Región de Atacama, O’Higgins y Metropolitana, a quienes se entregaron 29 000 botellas de agua retornable. De acuerdo a los resultados, solo un 10% cumplió con los estándares de la Organización Mundial de la Salud de consumir entre 6 a 8 vasos diarios.
Sin embargo, el director del Inta agregó que “lo que es peor, mirado desde la perspectiva de la obesidad, es que sustituyen el consumo de agua, un 45,3% lo hace por bebidas azucaradas y por jugos. Y algo que va a ser una preocupación en el futuro, es que el 27,9% de estos estudiantes que no toman agua, toman bebidas energéticas. Lo que los pone en un escenario de peligrosidad por riesgos cardiovascular y un montón de otros antecedentes”, sostuvo.
Asimismo, detalló que en 2023, otro estudio, ratifica las cifras: “Un 10,9% consume agua de forma diaria y un 89,1% no consume. La población pediátrica y adolescente no tiene esta cultura de consumir agua”.
Qué dice el proyecto
El texto presentado por los senadores introduce cambios al Código Sanitario indicando: “Los locales destinados a la venta de alimentos para su consumo dentro del establecimiento, deberán proporcionar a sus clientes, sin previo requerimiento, agua potable en cantidad suficiente. La entrega de agua deberá ser gratuita y complementaria a la oferta del establecimiento”.
La investigadora de la Biblioteca del Congreso Nacional (BCN), Virginie Loiseau, por su parte, afirmó que la corriente anglosajona pone el enfoque en el cuidado de la salud pública, principalmente en la estrategia de fomentar la ingesta de agua minimizando el consumo de alcohol, mientras que naciones de la Unión Europea lo abordaron desde la perspectiva de disminuir los residuos.
Virginie Loiseau detalló que “revisando casos como Argentina, Brasil, México, España, Australia, Estados Unidos y Francia, vemos que todos salvo España, aplican sanciones cuando no se cumplen con leyes que ordenan la dispensación de agua potable”.