Cuando los relojes marcaban las 06:03 horas de la mañana, de este 20 de marzo, los chilenos nos despedimos del verano y dimos la bienvenida al otoño 2025, con su equinoccio.
Esto corresponde a un evento astronómico que marca la igualdad en la duración del día y la noche y la transición definitiva hacia condiciones más frescas y variables en el país.
Los equinoccios se producen en las mismas fechas tanto para el Hemisferio Norte como para el Sur, de modo que cuando para el Hemisferio Sur se produce el equinoccio de otoño, para el Hemisferio Norte corresponde el de primavera.
Una estación de cambios climáticos
De acuerdo a Meteored, las temperaturas, que han permanecido cálidas en el interior, comenzarán a descender paulatinamente, con un enfriamiento más notorio hacia el fin de semana.
Este cambio estará influenciado por el retroceso de la baja térmica, permitiendo el ingreso de aire marino más húmedo, lo que propiciará un incremento de la nubosidad desde el sur hacia el norte.
De hecho, entre el domingo 24 y el lunes 25, la nubosidad alcanzará las regiones de O’Higgins y Metropolitana, acompañada de un descenso térmico en el interior.
Los meses de otoño se caracterizarán por un clima más frío, lo que también implicará un aumento en la concentración de polvos contaminantes en el aire y una mayor circulación de virus.
En respuesta a esta situación, el Ministerio de Salud anunció la anticipación de la campaña de vacunación para este año, buscando proteger a la población de enfermedades estacionales. El otoño se extenderá durante tres meses, finalizando el 20 de junio.
En tanto, el próximo 5 de abril, los chilenos, a excepción de quienes residen en la Región de Magallanes, deberán atrasar sus relojes en 60 minutos para dar inicio al horario de invierno. Este ajuste horaria es una práctica habitual en el país y busca aprovechar mejor la luz del día durante los meses más fríos.