El 10 de noviembre de 2019 la vida de Josefa Candia cambió para siempre. Y después de cinco años, tendrá que enfrentar el juicio oral en el que pretende condenen a quien acusa de haberla violado, mientras participaba en una fiesta. Esto con muchos puntos en común con los casos de Manuel Monsalve y Jorge Valdivia.
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La joven lo denunció tiempo después, acusándolo de haberse aprovechado de su estado de ebriedad y de haberla violado al interior de un furgón. Todo esto mientras la joven estudiaba derecho y además tenía un emprendimiento de organización de fiestas y cumpleaños, las cuales en su mayoría eran en la comuna de Colina, donde vivía.
En ese contexto, Candia organizó una fiesta para una joven, desempeñándose como anfitriona y controlando el acceso de los invitados en el portón del inmueble. Ya terminando su labor, se integró a la celebración, ya que conocía a presentes, con los que compartió. Dentro de uno de los grupos divisó al querellado, ya que desde los 14 años dice ubicarlo, por amistades en común, pero nunca habían tenido una relación más allá de coincidir de manera lejana.
“Habiendo transcurrido alrededor de media hora, 45 minutos desde que empecé a compartir en la fiesta, recuerdo haber tomado dos tragos, los que pedí en la barra a la persona que estaba de bar woman, mi amiga M.B.F, a quien observé en todo momento cuando los preparaba. Posteriormente recuerdo haber bailado y sentirme algo mareada al punto de estar bajo la influencia del alcohol. A partir de ese instante me fui a negro, perdí el conocimiento y no recuerdo absolutamente nada más hasta que desperté dentro de un furgón, acostada en el suelo y totalmente desnuda”, precisa la denunciante en su declaración.
Consultado Pérez por la investigación, dio un dato no menor, que el imputado al otro día la increpa porque vomitó su vehículo. En tanto, la joven dijo en su declaración que sus amigas la empezaron a buscar y comenzaron “a gritar mi nombre, momento en el cual se abre la puerta de un furgón blanco en el que me encontraba, se asoma el imputado abriendo la puerta del costado derecho del vehículo a lo que ella le pregunta si me ha visto, a lo que el señor N.E.I. hace caso omiso y se retira velozmente del lugar. Acto seguido me encuentra tirada adentro del furgón, completamente desnuda, quien con la ayuda de su hermana me ponen la ropa”.
El imputado N.E.I. fue formalizado en abril del 2022 por el delito de violación y en la misma audiencia la Fiscalía solicitó la prisión preventiva, pero el tribunal resolvió imponer la medida cautelar de arresto total. No obstante, en la actualidad, está con firma y arraigo nacional.
La investigación formalizada continuó con su desarrollo y finalmente cerró la misma en diciembre del año 2023 en contra del imputado, formulándose posteriormente acusación en su contra.
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El tribunal fijó audiencia para realizar el juicio oral para junio de este año 2024, pero por problemas de licencias médicas y vacaciones de algunos testigos y peritos del Ministerio Público que no iban a poder asistir y que son fundamentales para la Fiscalía, se solicitó reagendar el inicio del juicio oral, situación a la que finalmente el tribunal accedió fijando como nueva fecha de inicio para este 19 de diciembre.
Consultado Pérez por la investigación, hay un dato no menor, que el imputado la increpa porque vomitó su vehículo, lo que probaría en este caso, que sí había estado de ebriedad. “En un instante lo miré fijo a los ojos sin poderle decir nada, alcancé a mirar hacia un lado y vi mi ropa amontonada acto seguido volví a perder el conocimiento”, precisa la joven en la querella.
En este punto se detiene el abogado y precisa que este caso tiene muchos puntos similares al del exsubsecretario Manuel Monsalve, quien está en prisión preventiva tras ser detenido por violación. La denunciante asegura que ella perdió el conocimiento y que quien era autoridad, se aprovechó y la violó, de lo cual se dio cuenta al otro día en la mañana.
El abogado indica que pidió una orden de entrada y registro contra el imputado, para requisar aparatos tecnológicos como celulares, pero esto se hizo luego que pasara mucho tiempo, por lo que desde la PDI le precisaron que no se encontró absolutamente nada. “Se perdió mucho tiempo, eso se debió haber hecho de inmediato”, precisó y en esto lo comparó con el caso Monsalve, que sí tuvo incautación rápido de sus celulares.
La madre de Josefa, Catalina Sarmiento, lleva una lucha diaria en su cuenta de Instagram, exponiendo el caso cuando falta muy poco para el juicio. Ella vive fuera de Chile, mientras la denunciante se quedó en Chile y ahora, se dedica a la música urbana.
Publimetro intentó contactar al abogado Leonardo Bataglia, quien defiende al imputado, pero no fue posible concretarlo.