Un mes se cumplirá este domingo de la misteriosa desaparición de Julia Chuñil Catricura, quien fue vista por última vez el pasado 8 de noviembre en la localidad de Máfil, región de Los Ríos, luego que saliera a buscar a sus animales en el sector de Los Ciruelos.
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Si bien tanto familiares, como amigos y autoridades iniciaron de inmediato un trabajo de búsqueda, hasta el momento no se han conseguido pistas que permitan dar con su paradero.
Según relató su hijo, Andalí Troncoso, durante las primeras semanas de búsqueda lo único que vieron fueron “sus huellas, las de un vehículo, un bastón que ella usaba además de un cojín”.
En la zona se encuentran trabajando funcionarios de la Policía de Investigaciones (PDI) con la ayuda de un helicóptero, mientras que personal de Carabineros de la región de Los Ríos intensificó la búsqueda con alumnos de Esfocar Valdivia, GOPE y Labocar para un mayor rastreo, principalmente, en el sector Huichaco.
Marcela Collinao, por su parte, sobrina de Julia Chuñil, sostuvo que están “muy preocupados por ella, hemos hecho muchos esfuerzos. Hago un llamado a las autoridades políticas y jurídicas para que esto no vuelva a pasar”, argumentando que “no puede ser que se estén desapareciendo las mujeres mapuche y que no haya rastro de nada”.
Por tal razón, Collinao hizo un “llamado a las comunidades en general para que se movilicen y visibilicen el caso de mi tía”, sentenció, pidiendo “redoblar su búsqueda. No puede ser que en estos tiempos se pierda una lamien (hermana) mapuche”.
Habría recibido amenazas
Julia Chuñil es una dirigenta de una comunidad mapuche y según relató a Mega Lyssette Sánchez, nieta de la mujer, su abuela “estaba recibiendo amenazas”.
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La mujer sostuvo que “ella sube un cerro en búsqueda de sus animales, y desde ahí no se sabe nada más de ella. Se le perdió un animal, un vacuno, y ella sube con su perrito ‘Cholito’, quien también se encuentra desaparecido. Nunca bajó del cerro”.
Lyssete precisó que “últimamente estaba recibiendo amenazas, días antes a muchos vecinos les decía que la querían sacar de este territorio, porque ella además es presidenta de una comunidad indígena (...) Hay personas que querían comprar el terreno y ella se negaba”.
