El pasado 23 de julio Ariel Sauer, uno de los dueños de Factop, declaró ante la Fiscalía que la empresa realizó un préstamo a Andrea Molina para financiar su campaña parlamentaria de 2017 como senadora por Valparaíso, la cual perdió.
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Según publicó The Clinic, esta “es la primera vez que uno de los protagonistas del caso Hermosilla menciona el financiamiento de campañas políticas”, usando la empresa de factoring donde se transaban miles de facturas falsas, luego que Ariel Sauer asegurara le prestaron $120 millones a la exdiputada de la UDI.
Además, de acuerdo a La Tercera, según la reorganización judicial de Factop, que se tramita en el 7° Juzgado Civil de Santiago, la deuda de Andrea Molina alcanzaría los $447 millones.
En la declaración que da a conocer The Clinic, Ariel Sauer detalló que el vínculo con Andrea Molina se gestó por medio de quien era su pareja en ese momento, Jorge Peralta, con quien ya habían hecho negocios y conocía desde el año 2014.
“Partimos haciendo operaciones de capital de trabajo con cheques las cuales se fueron renovando sin pago de capital ni interés, porque él (Jorge Peralta) no tenía fondo. Él tenía una empresa de poleras que se llamaba Playeras Tex, la cual vendía poleras y otros productos para las campañas de los diputados y senadores”, sostuvo Sauer ante la fiscalía.
Además, agregó que “en el año 2017, nos presenta a su pareja Andrea Molina, quien nos solicitó financiamiento por $80 millones para su campaña a senadora por la quinta región y luego como $40 millones más, los que serían destinados para su campaña electoral, desconozco si ese fue el fin en que fueron ocupados y si fueron rendidos de acuerdo a lo que establece la Ley”.
Según el medio citado, al revisar “las rendiciones con los ingresos y gastos de esa campaña senatorial de 2017, publicadas por el Servicio Electoral (Servel), y comprobó que los aportes propios declarados por Molina solo alcanzan los $63,6 millones, y que en ninguna parte de su rendición hace mención a Factop”.
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El abogado de Andrea Molina, Andrés Bustos, en tanto, añadió que el monto real del préstamo fue de $90 millones y no se habría utilizado para la campaña sino que para solventar gastos posteriores a la misma.
“Fue para vivir, no tenía lucas y hasta el día de hoy ella no posee unas finanzas muy saludables. Estos tipos la dejaron con una deuda inventada, una bola de nieve de mucha plata que se ha filtrado por todas partes, como muchas otras personas que acudieron a esta financiera que parecía legal y estamos claros que la cuestión ha sido un fraude”, sostuvo el abogado.
