Impacto en el paracaidismo brasileño y chileno causó la muerte accidental de Carolina Muñoz Kennedy, quien el sábado pasado falleció en la localidad paulista de Boituva como consecuencia de la falla del paracaídas principal que utilizó durante una sesión de entrenamiento.
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Un doloroso accidente que tanto en Brasil, país en el que se radicó hace cinco años; como en Chile, donde era reconocida como una destacada cultora de la disciplina por parte de la Federación de Paracaidismo, provocó variadas reacciones de parte de su entorno deportivo.
Conmoción por fatal accidente de paracaidista chilena
Como el testimonio que ofreció en lun.com la buceadora brasileña Carol Schrappe, quien de ser instructora de buceo de Muñoz, a fines de 2022, pasó a convertirse en la mejor amiga de la deportista chilena en su último año y medio en territorio paulista.
“Nos conocimos cuando se inscribió a finales de 2022 en uno de los cursos de mergulho libre (buceo) que hago habitualmente en Campinas, y nos volvimos muy amigas en este último año y medio. Viajaba conmigo a varios lugares en Brasil, y acabábamos de pasar un mes entrenando en Egipto, estaba feliz”, confesó Carol, aún impresionada por el desenlace fatal de Carolina.
Quería dejar el paracaidismo, porque había perdido algunos amigos cercanos en el pasado
— Carol Schrappe
“Quería dejar el paracaidismo, porque había perdido algunos amigos cercanos en el pasado. Y estaba haciendo la transición en su carrera hacia el buceo libre. Quería ir dejándolo de a poco, no por completo, porque le gustaba mucho y tenía experiencia. Sabía de los riesgos, estaba muy deseosa, pero infelizmente no hubo tiempo”, dijo.
“En el fondo de mi corazón estoy muy agradecida por haber tenido la oportunidad de conocerla, de convivir con ella, de haber podido viajar con ella. Aprender también de ella. Era una mujer muy fuerte, una persona decidida. Vivía sola, pero cerca de sus amigos, una persona muy alegre, muy valiente, que valoraba la vida”, agregó la buceadora, quien remoró entre lágrimas lo que su última expedición por territorio egipcio.
“Fue un viaje muy especial, nos pasamos un mes entrenando, yo lo hacía por batir un récord y ella por aumentar sus profundidades, llegó a alcanzar 56 metros. Estábamos en un país muy diferente, con una cultura musulmana, así que fue un aprendizaje tremendo para ambas”, reveló Schrappe, quien estos días ha compartido su dolor con el de la familia de la chilena, cuyos padres han llegado hasta su casa en Boituva para realizar su cremación y posterior traslado de sus restos a Chile.
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En el fondo de mi corazón estoy muy agradecida por haber tenido la oportunidad de conocerla, de convivir con ella, de haber podido viajar con ella
— Carol Schrappe
“Su mamá, Ximena, ya está Boituva; y su papá y su hermana llegarán el martes. Hoy (ayer) hablé con ella (mamá de Carolina) en su casa y fue muy especial mostrarle lo que Carolina había comprado allá (Egipto) para ella. Se le hará un velorio y el miércoles será su cremación. Después de eso tienen que esperar los procedimientos legales acá en Brasil y volverán a Chile”, concluyó.
“Hablé con el presidente de la Federación de Brasil, Wellington Mendes, quien me comentó que había sido una falla del paracaídas principal, y que la reserva se había comportado de una forma defectuosa también, y se precipitó a tierra. Hace diez años que no tenían un accidente de esta naturaleza”, agregó, por su parte, Patricio Candia, presidente de la Federación de Paracaidismo de Chile.
“Carolina era muy querida en Brasil, tanto como acá, en realidad. Viajaba constantemente a Chile y nos tenía al tanto de sus actividades, sus récords, etcétera. Ella llegó a la zona de Chiñihue, acá en Cuatro Diablos (Melipilla), y empezó a destacarse rápidamente. Después me tocó acompañarla a Rusia a un entrenamiento en el túnel del viento, hasta que fue desarrollándose y destacándose frente a sus pares, y al final emigró a Boituva hace como cinco años. Y empezó a hacer su sueño realidad, entre sus actividades como kinesióloga, y de paracaidismo también”, finalizó.
