Una serie de nuevos elementos en torno a la denuncia por abuso sexual y violación que pesa contra el exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, se dieron a conocer durante la audiencia de cautela de garantías que solicitó la defensa del imputado y donde además se zanjó entregar a la Fiscalía Metropolitana Centro Norte el tercer celular que se incautó al acusado y que estaba bajo custodia del tribunal.
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Si bien ya se conocía que Monsalve había instruido a personal de la Policía de Investigaciones que revisara las cámaras de seguridad del Hotel Panamericano -donde se hospedaba y habría ocurrido la violación-, como del restaurante donde habían estado previamente con la denunciante, ahora se confirmó por parte del fiscal regional Centro Norte, Xavier Armendáriz, que se han “enterado de que podrían existir diligencias de esta naturaleza en otros recintos, no solo en el restaurante donde se originaron los hechos, ni en el lugar donde ocurrió el delito, sino también en otros sitios. Esta información aún está en curso”.
A esto se suma, la orden que habría dado el exsubsecretario a la PDI para que se acercaran a la víctima antes que se concretara la denuncia en su contra, la cual, según el relató de la Fiscalía, no fue informada por Manuel Monsalve a sus superiores, que en este caso sería la ministra del Interior, Carolina Tohá y el Presidente de la República, Gabriel Boric.
Armendáriz sostuvo que saben “que ha habido gestiones previas sin que mediara ninguna denuncia ni ninguna comunicación oficial a autoridades superiores por parte del imputado. Ordenó llevar adelante diligencias con sigilo, que no solo asistieron en estas intervenciones de cámaras, sino que además llegaron al círculo íntimo de la víctima”.
El persecutor detalló que “el primer detective que habló con la víctima fue una persona dentro del curso de estas diligencias ordenadas, pedidas, sugeridas, y no voy a usar más verbos porque todavía no sé exactamente cómo encuadrar esa actividad, hasta que tengamos completos los hechos, por parte del imputado”.
En ese sentido, Armendáriz complementó que “se acercaron a su departamento. Y el imputado Monsalve le señaló a la Policía de Investigaciones, y lo sabemos por la declaración de la Policía de Investigaciones, una funcionaria de la Policía de Investigaciones, que él le pidió que se acercaran a la víctima”.
Enmascaramiento
En su exposición el fiscal Armendáriz descartó además que la defensa de Monsalve pueda tener acceso directo con la policía civil de los resultado de las diligencias que están haciendo en torno a las grabaciones y demás pericias ordenadas por el Ministerio Público, ante que la misma Fiscalía.
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“Los hechos ocurrieron del 22 al 23 de septiembre (…) Pasaron casi tres semanas hasta el 10 de octubre en que esta gestión no se hizo. Y el imputado no comunicó esta situación a nadie en función de su cargo. Y tres semanas después se preocupó de que tenía la memoria borrada”, sostuvo.
Armendáriz agregó que “creemos que aquello no obedece a una situación de esa naturaleza, sino que el señor Monsalve comenzó a pensar que iba a ser denunciado de un delito de violación”, por lo que se sospecha que buscaba “ejercer algún tipo de enmascaramiento” del caso.
Al término de la audiencia, el Fiscal Xavier Armendáriz no quiso entregar mayores detalles de la causa, indicando que esta era reservada y que lo que se conoció durante esta jornada fue planteado ante el tribunal, respecto de la cautela de garantías solicitada por la defensa de Manuel Monsalve.
