Catorce días alcanzó a estar prófugo de la justicia luego que el pasado martes 8 de octubre, alrededor de las 22 horas, César Alejandro Pedreros Carrasco, saltara por una ventana del Hospital de Urgencia Asistencia Pública (exPosta Central) desde el tercer hacia el segundo piso, para luego escapar por la calle Portugal con su bata puesta.
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La jefa de Flagrancia de la Fiscalía Centro Norte, Macarena Cañas, detalló tras la captura que Pedreros fue trasladado a la exPosta Central para tratarse de un padecimiento médico, sin embargo, se determinó que se infligió la herida para facilitar su fuga.
La detención fue llevada a cabo por detectives de la Brigada Investigadora del Crimen Organizado de la Policía de Investigaciones (PDI) en la comuna de Curarrehue en la región de La Araucanía.
El jefe de la Brico, prefecto Juan Pablo Pardo, informó que “desde el inicio de la investigación, se aplicaron diversas técnicas para rastrear su paradero”, logrando ubicarlo días después en la comuna de Villarrica, para posteriormente desplazarse a Curarrehue donde fue detenido bajo una identidad falsa.
Además, el funcionario policial señaló que Pardo cambió su aspecto físico para evitar su captura. “Estos sujetos suelen cambiar su imagen para pasar desapercibidos. Cuando se fugó, tenía el pelo blanco; al momento de la detención, lo tenía oscuro”, señaló.
César Pedreros Carrasco cumplía condena por delitos graves, incluyendo robo con intimidación y amenazas a funcionarios de Gendarmería. Su sentencia, emitida por el Juzgado de Garantía de Colina, se extendía hasta noviembre de 2026.
La fiscal Cañas, por su parte, afirmó que el caso de Pedreros será revisado por el Ministerio Público, para determinar si enfrentará nuevos cargos por usurpación de identidad. “Estamos evaluando otros delitos que podría haber cometido durante su fuga”, sostuvo.
