A la ministra de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, se le vino el mundo encima. Luego que se filtrara la ayuda que le pidió al abogado Luis Hermosilla para que influyera en su nombramiento al importante cargo y se abriera un cuaderno de remoción en su contra, ahora tuvo que enfrentar la peor de las humillaciones: La casa de estudios donde realiza clases de Derecho hace 40 años no la dejó entrar a su propia oficina ni a la de su exmarido.
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Así lo contó el medio La Tercera, revelando el momento de furia que pasó la jueza en la universidad, justo el día que su hija daba su examen de grado.
Fue el jueves en la mañana cuando Vivanco llegó hasta las dependencias de la Universidad Católica y subió hasta el cuarto piso para ingresar a su oficina. Pero, se encontró con la sorpresa de que estaba cerrada. Al solicitar las llaves le indicaron que habían sido entregadas por orden del Ministerio Público y le informaron que tenía prohibido acceder a ella.
Según cuenta el citado medio, esto generó la indignación de Vivanco quien es docente hace cuatro décadas y ese lugar era casi como su propio hogar. Tras la negativa, subió al quinto piso para esperar en la oficina de su exmarido, pero también le negaron el ingreso.
Prohíben ingreso de Vivanco a oficina y requisan su computador
Finalmente, tuvo que esperar a su hija en el tercer piso, afuera de la sala donde ella rindió el examen con éxito, siendo la única buena noticia que recibió en esa jornada.
El día anterior, accedió de manera voluntaria a entregar su celular y otros aparatos electrónicos los cuales fueron requisados por el OS7 de Carabineros desde su domicilio en La Condes. Por ese motivo, no entendía la nueva diligencia contra ella.
“La Fiscalía, según fuentes de Derecho UC, a través de un oficio pidió resguardar la oficina, es decir que nadie ingresara. Esto, debido a que la fiscal del caso, Carmen Gloria Wittwer, consiguió la autorización para incautar el computador que había en su despacho”, indicaron.
