La legisladora de Renovación Nacional, Camila Flores, viajó hasta la Región del Maule, precisamente al Centro Penitenciario de Molina, con el objetivo de visitar al excapitán de Carabineros, Patricio Maturana, quien cumple condena de 12 años y 183 día de presidio efectivo por el delito de apremios ilegítimos con resultado de lesiones graves gravísimas, a raíz del incidente ocurrido en el contexto del Estallido Social en noviembre de 2019, que involucró a la senadora Fabiola Campillai.
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“Es evidente que lo ocurrido fue una situación desafortunada, en la que, en ningún caso, tuvo la intención de causar daño. Se encontraba en el lugar y momento equivocados”, declaró le diputada en compañía de la hermana del excapitán, Karina Maturana y del consejero regional de Valparaíso, Percy Marín.
“No voy a dejar solo al capitán Maturana, vamos a estar presentes, porque su caso realmente es una injusticia. Las pruebas que usaron en su contra eran tan poco serias, y eran tan, desde mi perspectiva, infundadas, pero lo terminaron condenando igual”, fue tajante la congresista de 37 años.
Además, Flores hizo un llamado a solidarizar con los funcionarios de Carabineros que “cumplieron con su deber constitucional en un momento crítico para el país” y elogió la fortaleza de Patricio y la que ha tenido la hermana, quien suele ir a visitarlo al centro.
“Chile no se convirtió en una Venezuela gracias a carabineros como él, que está pagando con su libertad por haber defendido el orden público y el Estado de Derecho”, aseguró la política de RN.
Por último, la parlamentaria opositora subrayó en no abandonar al excapitán ni a su familia y que continuará denunciando lo que considera una injusticia: “Vamos a perseverar en acompañarlo, porque su caso realmente es una infamia. Recomiendo leer su libro, ‘Infamia’, para entender la situación que está viviendo. Su historia no puede ser olvidada”.
