Hace menos de una semana, un sismo de 7,1 sacudió a Japón. Como respuesta, la Agencia Meteorológica de la nación oriental emitió una advertencia sobre la alta posibilidad de un megaterremoto con una magnitud de hasta 9.1 en la trinchera de Nankai, un área con intensa actividad sísmica.
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La Agencia Meteorológica de Japón especificó que si ocurriese un temblor de una magnitud de hasta 9,1 en la trinchera de Nankai, existe una amenaza de resultados destructivos tanto en la nación nipona, como en otros lugares del mundo.
Perú figura prominentemente entre las áreas que podrían verse impactadas, dado que un terremoto en Japón que iguale o exceda los números previamente citados tiene el potencial de producir un tsunami que alcanzaría las costas peruanas del océano Pacífico.
En una conversación con Infobae, Hernando Tavera, líder del Instituto Geofísico del Perú (IGP), declaró que un terremoto de tal intensidad podría generar un teletsunami, es decir, un tsunami que atraviesa extensos recorridos marinos.
“Japón y Perú comparten el Cinturón de Fuego del Pacífico, una región altamente sísmica”, explicó Tavera. “Históricamente, ambos países han experimentado tsunamis de gran magnitud, y estos eventos pueden cruzar océanos enteros”, informó.
¿Perú está preparado?
Tavera expresó que las repercusiones podrían ser desastrosas y a pesar de la advertencia de Japón, las entidades gubernamentales de Perú han decidido crear conciencia entre los ciudadanos acerca de los peligros de los tsunamis y las alarmas de aviso anticipado.
El Segundo Simulacro Nacional Multipeligro se realizará el próximo 15 de agosto. En Lima y Callao, la simulación se centrará en las posibles consecuencias de un terremoto de 8.8 de magnitud, incluido un tsunami.
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Terremoto con alerta de tsunami
El 8 de agosto de 2024 hubo un sismo de 7.1 que impactó las costas de Kyushu, en el sur de Japón, provocando una advertencia de tsunami. Las autoridades aconsejaron a la población mantenerse lejos de la costa y no entrar al mar.
Un reporte de la Agencia Japonesa de Meteorología (JMA) especificó que, sesenta minutos post terremoto, se registraron olas de medio metro, dos decímetros y un decímetro en ciertas localidades.