Días atrás se dio a conocer que Eduardo Macaya, cuando estuvo en prisión preventiva durante tres días, habría recibido ciertos beneficios al interior de la cárcel, como estar en una celda aislada, tener horario de visitas libres e incluso un estacionamiento para su hijo Javier Macaya, en un lugar que es exclusivo para los funcionarios y el alcaide.
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Producto de ello, la Fiscalía de Alta Complejidad de O’Higgins tomó medidas para obtener pruebas que demuestren el supuesto tráfico de influencias y requisó los teléfonos celulares de los gendarmes que estarían involucrados y el de la jefe de unidad de la Cárcel de Rancagua, informó Bío Bío.
Dentro de los beneficios que indica el citado medio, destacan que “el padre del senador y ex presidente de la UDI, Javier Macaya, hace una semana fue ingresado a la enfermería de la cárcel de Rancagua en una sala destinada a mujeres, en lugar de ser conducido a celdas de aislamiento o módulos de baja peligrosidad como es habitual. Fuentes de La Radio hablaban de un trato diferenciado hacia Macaya”.
“De encontrarse irregularidades, se aplicarán las sanciones correspondientes según la Ley de Sumarios Administrativos (...) si hubo cualquier actuación al margen de los protocolos que establece Gendarmería, eso va a quedar claramente establecido en el sumario y se van a aplicar las sanciones disciplinarias que corresponden”, indicó el subsecretario de Justicia, Jaime Gajardo
Eduardo Macaya vuelve a la cárcel
Tras quedar con arresto domiciliario por la condena a seis años de cárcel por delitos de abusos sexuales reiterados contra dos menores, el tribunal de San Fernando revirtió la decisión e indicó que Eduardo Macaya y deberá volver a prisión preventiva
La medida fue adoptada por el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal (TOP) de San Fernando, luego de una audiencia de revisión de medidas cautelares.
