Durante la tarde de este miércoles, el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago dictaminó medidas cautelares para cuatro imputados aún pendientes, luego de tres días que duró la formalización del llamado Caso Factop.
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El Juzgado decretó prisión preventiva para los hermanos Daniel y Ariel Sauer Adlerstein, bajo los cargos judiciales de autores de delitos tributarios, estafa, lavado de activos e infracción a la ley de mercado de valores.
Por su parte, el socio minoritario de Factop, Rodrigo Topelberg, quedó con arresto domiciliario total, misma medida que se dectretó para Luis Flores, según consigna Biobío Chile.
La Fiscalía Metropolitana Oriente acusó a Daniel y Ariel Sauer, en conjunto con Rodrigo Topelberg, de crear una serie de empresas dedicadas a actividades comerciales, en el sector de la industria financiera, con opeaciones, en principio, lícitas. No obstante, trascurrido cierto tiempo registraron fraudes a sus clientes, personas naturales y jurídicas, perjudicando de paso el normal funcionamiento del mercado.
A la fecha se han contabilizado más de 32 mil millones de pesos defraudados por los imputados. Asimismo, el Servicio de Impuestos Internos denuncia la emisión de más de 16 mil boletas falsas.
Causa judicial originó Caso Audios
Además de la resolución de este miércoles, en anteriores jornadas de formalización el Juzgado dictaminó medidas cautelas para otros dos imputados. Ellos son Alberto Sauer, padre de los hermanos Daniel y Ariel, y el abogado Darío Cuadra, socio de Guayasamín Spa, entidad en medio del Caso Factop.
La presente causa también originó el denominado Caso Hermosilla o Caso Audios, surgida tras la filtración de audios que registraban una conversación de Daniel Sauer con los abogados Luis Hermosilla y Leonarda Villalobos, en la cual referían eventuales pago de coimas a funcionarios del SII y al CMF.
Cabe señalar que la detención de los imputados en el Caso Factop se llevó a cabo el pasado lunes 8 de abril, en un procedimiento en el cual la Fiscalía Metropolitana Oriente obtuvo permisos para la incautación de objetos “como celulares, tablet, aparatos tecnológicos, videos, entre otros”, los cuales se consideró útiles para la investigación del esposo de Titi Ahubert, Daniel Sauer, así como los demás involucrados.