Fue en 2012 cuando la Asamblea General de la ONU decretó que el 20 de marzo fuera celebrado el Día Internacional de la Felicidad, reconociendo a tal emoción y al bienestar como aspiraciones universales de los seres humanos, por lo que es importante su inclusión en las políticas de los gobiernos.
Y tal resolución surgió por una propuesta de Bután, un pequeño reino asiático de 800 mil habitantes que desde principios de la década de 1970 reconoce el valor de la felicidad nacional sobre el de los ingresos nacionales, y que por ello prioriza la Felicidad Nacional Bruta por sobre el Producto Nacional Bruto.
Este miércoles fue dado a conocer el Reporte de Felicidad Mundial 2024, y en la lista Chile aparece en el puesto 38 de 143 naciones, lo que quedó determinado tras analizar seis “evaluaciones de vida”: PIB per cápita, apoyo social, expectativa de vida saludable al nacer, libertad para tomar decisiones, generosidad y percepciones sobre corrupción.
Finlandia es el país más feliz del mundo, por séptimo año consecutivo. Lo siguieron Dinamarca, Islandia, Suecia e Israel en el “top 5″. El último es Afganistán.
En la lista somos quintos en Latinoamérica y segundos a nivel sudamericano. Nos superan Costa Rica (12), México (25), Uruguay (26) y El Salvador (33).
Segregados por edad, los menores de 30 años son los “más felices” en Chile, ubicándose en el lugar 39 a nivel global. Y ocupamos el puesto 46 con las personas “menos felices” sobre 60 años.
“Desde hace tiempo es medida la felicidad, principalmente con encuestas, que para esos efectos es entendida como las condiciones que cada sociedad da para el pleno desarrollo de las potencialidades de su gente. Y se baja o se sube porque la gente va cambiando de opiniones”.
“Los países latinos aparecemos arriba en la lista por variables culturales que nos llevan a ser más expresivos emocionalmente que, por ejemplo, la gente del oriente asiático”, señala Gonzalo Martínez Zelaya, docente de la Universidad de Viña de Mar y Doctor en Psicología por la Universidad del País Vasco, en España.
Y según Pablo Palma, director de la carrera de Psicología en la Universidad Autónoma de Chile, “hay que tomar con mesura estos datos, porque existen contradicciones cuando la muestra es hecha desde afuera a cuando la hacemos nosotros”.
“Y eso puede deberse a lo que se pregunta y/o a cómo se pregunta, y también al contraste que surge al cotejar esto con los malos indicadores de salud mental del país, que quizás antes estaban invisibilizados”.
OTRA ENCUESTA INTERNACIONAL
Aprovechando la conmemoración de ayer, la empresa internacional Ipsos lanzó su último informe “Felicidad Mundial 2024″, que muestra las percepciones sobre el tema de más de 24 mil personas en 30 países, incluido el nuestro.
Y de acuerdo a este trabajo, un 68% de los chilenos se declara una persona “feliz” o “muy feliz”, lo que nos posiciona ligeramente por debajo del promedio mundial (71%) e indica un descenso de once puntos respecto de 2023.
Además, Chile se ubicó como el penúltimo en Latinoamérica, y en la posición 22 entre las 30 naciones abordadas en el estudio.
Esta caída de once puntos porcentuales deja a Chile como el país que más disminuyó su indicador de felicidad en comparación con 2023.
Pero hay que recordar que en agosto de 2020, durante uno de los peores periodos de la pandemia de coronavirus, sólo el 35% de las personas consultadas acá se declararon felices, lo que implica ahora un cambio positivo de 33 puntos.
De acuerdo a Karla Zamora, líder de estudios cualitativos en Ipsos Chile, “la felicidad es un fenómeno complejo y subjetivo, influenciado por factores personales y sociales... La baja en la felicidad de los chilenos está más arraigada en factores externos que internos”.
Y añade que “los chilenos expresan insatisfacción por su seguridad personal, por la incertidumbre que permea a la situación social y política, y por los desafíos económicos que les impactan de forma directamente a sus bolsillos. Estos son factores fuera del control de las personas, por lo que generan un desgaste emocional importante, con repercusiones significativas en la salud mental de nuestra población. Esta realidad resalta la necesidad urgente de abordar estos problemas a nivel societal para mejorar el bienestar de los chilenos”.
Según el estudio, las naciones con mayor porcentaje de personas que se declaran felices son Países Bajos (85%), México (83%) e Indonesia (82%).
Y aquellos con la menor tasa de felicidad son Japón (57%), Corea del Sur (48%) y Hungría (48%).
En la región nos superan México (83%), Brasil (81%), Argentina (73%) y Colombia (70%), mientras que estamos igualados con Perú como los países menos felices en toda América Latina.
