Esta semana Belarmino Parra Álvarez se transformó en un héroe nacional, al devolver un bolso con 27 millones de pesos en efectivo, el que se encontró en la calle.
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El recolector de residuos domiciliarios ha explicado una y otra vez que realizó esta acción para darle el ejemplo a su hijo y porque además es lo que correspondía. Y si bien lo hizo sin esperar nada a cambio, algunas cositas le están llegando, además del tazón que le regaló la PDI.
Recolector cuenta la reprobable actitud del dueño de los $27 millones que encontró en la calle
De acuerdo a la Prensa Austral, la comunidad magallánica, de donde es oriundo Berlamino, lo ha querido honrar con dinero en efectivo, postres, joyerías, camisetas, comida y hasta serenatas en violín.
Son distintos negocios y emprendedores que se han puesto en contacto con el honrado joven, para que cobre su premio. Uno de estos es la tienda “Señores Regalos” que le ofrece una camiseta, “Quincho Findelmundo” una pizza familiar, “Delisushi” una tabla de 30 cortes, “Donde Gallardo” una canasta familiar, el salón de eventos “Galekids” dos horas de juego libre junto a cuatro amigos o “Kairos Magallanes” un kit gamer para su hijo.
Pero no sólo eso, hay una botillería y almacén que dice esperarlo con $500.000 para él y su familia. El pub “Icon” les ofreció $50.000, también un gimnasio le regaló dos meses de entrenamiento personalizado para él y su señora equivalentes a $640.000 y la “Tiendita Americana” otra giftcard de $100.000.
¿Cómo ocurrió el hallazgo?
El joven relató que todo ocurrió cuando iban pasando a las afueras de un pub, en donde pudo visualizar que había un bolso sobre una banca y al revisarlo se dio cuenta que estaba repleto de billetes de $10 mil y $20 mil pesos. Ante tal hallazgo, el trabajador le comentó lo sucedido al chofer del camión y posteriormente le informaron al supervisor de la compañía.
Acto seguido, el responsable de la empresa se acercó hasta la policía para hacer la devolución de los $27 millones que pertenecían a su desconocido propietario.
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Posteriormente, la PDI comenzó a realizar las diligencias respectivas y lograron dar con el paradero del dueño, que se trataba de una persona que recién había recibido un finiquito.
Con un final feliz, Belarmino mostró su satisfacción tras regresar la millonaria cifra a su propietario, quien no lo podía creer.
Asimismo, aseguró estar feliz por “hacer ese buen acto y, una vez más, enseñarle a mi hijo lo que es la honradez. Siempre le enseño a mis hijos que si encuentran algo, hay que devolverlo”.