Han pasado 48 años desde que Michelle Bachelet estuvo detenida en Villa Grimaldi, sitio de tortura de la dictadura liderada por Augusto Pinochet. Sin embargo, a pesar del tiempo, la exmandataria recuerda claramente los oscuros días que pasó en el centro ubicado en Peñalolén.
Según las memorias de la expresidenta, cuando la llevaron a interrogar intentó dejar en claro que “no tenía nada que ver con el MIR, yo no conocía a ninguna de las personas que estaba ahí”.
“El señor que me toma el interrogatorio, fue largo, como de 3 a 4 horas, fue larguísimo, yo estaba con el rostro vendado para no saber quiénes son”, aseguró.
Posteriormente, uno de estos uniformados le realizó una insólita pregunta que la dejó marcando ocupado: “Él me hace un interrogatorio súper duro y de repente me dice: ‘Usted está en quinto de medicina’ y mi hija quiere estudiar medicina... ¿Qué consejo me daría para que yo le de a ella?”.
“‘¿En medio del interrogatorio?”, le consultó Iván Núñez notablemente sorprendido.
“Claro, y yo decía alguien se volvió loco porque en realidad era como muy curioso (...) Me animé a darle el consejo y le dije: mira dígale que estudie harto”, recuerda la exmandataria.
“¿Y eso no sirve como una técnica para ablandar?”, le preguntó el periodista, a lo que Michelle enfatizó en que “no, porque fue al final”.
“Yo decía pero este tipo... ¿Cómo se divide su cabeza? Entre la persona que la interroga y enventualmente tortura y en un padre”, expuso.
“Después de eso o al día siguiente, viene el jefe de la DINA, Manuel Contreras, se me acerca y dice ‘esta no es nadie, la pueden liberar’, yo estaba vendada pero podía identificar la voz”, cerró Bachelet.