A 48 años de estar detenida en Villa Grimaldi, la exPresidenta de la República, Michelle Bachelet regresó al lugar y contó detalles desconocidos sobre su estancia en el sitio de torturas.

Cabe recordar que durante la dictadura liderada por el General Augusto Pinochet, cientos de chilenos y chilenas fueron apresados por las fuerzas del Ejército en varios sitios ubicados en diversas partes de nuestro país, y hoy estos se convirtieron en lugares de memoria.

En este contexto, es donde en una entrevista con 24 Horas, Bachelet quiso contar su fuerte testimonio. “Este lugar trae tristes recuerdos, pero también me acuerdo de la solidaridad de las personas que estábamos en las mismas condiciones”, comenzó diciendo.

Sobre cómo fue ese día de febrero de 1975, la exmandataria detalló que todo ocurrió cuando “volví a almorzar a la casa (de su madre) y estaban mis sobrinos (...) de repente tocan el timbre y aparecen dos señores que eran un capitán y un comandante, nos dicen ‘somos de la DINA’, piden hablar con nosotros y no nos dan los nombres; y le dicen a mi mamá que han sabido que ella es ayudista del MIR y tenemos que irnos con ellos”.

Acto seguido sonó el teléfono y era su pareja, quien ese momento era jefe del Partido Socialista. “Teníamos como una sigla para decirnos ‘estoy en problemas’.... y le digo fulanita va a Dinamarca. ¿Muy obvio no? Hoy día lo pienso y digo que ingenuidad”.

Posteriormente, los militares “nos metieron a un auto, nos pararon cerca de otro centro de tortura en Ñuñoa, nos pusieron la venda y nos trajeron acá”, recuerda, en donde fue sometida a un intenso interrogatorio.

La reflexión de Michelle Bachelet

Ante las preguntas de Iván Núñez y su notable emoción al recordar este trágico momento, Michelle Bachelet realizó una potente reflexión: “Esto no puede ocurrir nunca más en el país… no podemos llegar a una polarización”, reflexionó mientras caminaba, admitiendo que el actual clima político sí la hacía recordar el momento”.

“Es importante haber hecho este programa en esta Villa porque el setenta por ciento de los chilenos no había nacido para el golpe de Estado. Por lo tanto, muchos de ellos, supieron algo, pero no todo, y en sus familias han recibido una información sesgada”, continuó.

Finalmente, Bachelet reprochó la mala memoria que tienen algunos compatriotas sobre lo que realmente significa una dictadura militar.

“Cuando uno ve encuestas que dicen que hay un porcentaje no menor de la población que cree que la democracia da lo mismo que la dictadura, o que creen que el mejor gobernante de la historia de Chile es Augusto Pinochet, uno dice qué horror, aquí estamos ante un peligro”.

“El problema es que además de polarizado, hay negación de lo que pasó y hay justificación. Entonces, yo siento que tú puedes pensar políticamente lo que quieras, pero hay ciertos límites... y uno de ellos es la verdad, la memoria histórica”, agregó.

“Cuando los pueblos no tienen memoria histórica muchas veces están condenados a repetirla. Eso es lo que me parece más grave”, cerró.