Sin dudas, hoy por hoy, la mujer fuerte del gobierno de Chile es la Ministra del Interior, Carolina Tohá y no es fácil lidiar con la violencia, el narcotráfico y la polarización de la política. Dentro de esa apretada agenda de gobierno, se hizo un espacio y conversó con Carolina Urrejola para la nueva edición de Revista Velvet.
PUBLICIDAD
La secretaria de Estado contó, entre otras cosas, cómo sobrelleva la intensidad de gobernar en el Chile del 2023. “La intensidad te lleva. Te mueve una energía que no sabes que tienes y genera gratificaciones que se sobreponen a los momentos difíciles. Este es un trabajo precioso. Todos los días me dan ganas de hacerlo. Hay momentos en que me siento preocupada, inquieta, pero nunca tengo ganas de huir”, aseguró Tohá.
Contrario a lo que se podría pensar, la ministra es optimista del momento en que está Chile. “Tenemos una tendencia a mirarlo mucho más sombrío. Como todos los momentos de cambio de folio: hay dolores y tironeo, pero comparando Chile con el resto del mundo, estamos en una posición que debiera esperanzarnos”.
Pese a los desafíos diarios, a la ministra le encanta su trabajo. “Pasan muchas cosas que tienen una dimensión muy intensa, con una sensación de peligro constante y de desafío que no te aburres ni por un momento. Y está tan líquida la política, tan llena de sorpresas, que todos los días hay que leer lo que está pasando. Si se tiene cierta madurez –que yo a estas alturas tengo– se logra sobrellevar la tensión de un modo mucho más tolerable. Es entretenido, no lo puedo negar”.
Incluso desclasificó que “con el Presidente tenemos una especie de código. Un permiso para el humor negro que hace muy bien (…) cuando se llega a un punto de agotamiento, hay espacios tragicómicos. Es muy importante en la vida aprender que de todo uno puede reírse con respeto. Con el tiempo me he ganado mi derecho a reír. Yo de chica era más seria, terrible. Entraba fácilmente en la categoría de tonta grave”.
Frente a la pregunta acerca de ¿qué viene después de esto?, la ministra es sincera: “creo que no me puedo imaginar la vida después de esto (risas). O sea, esto es de una intensidad, que todo el resto me parece irreal. Siempre he sido cautelosa, pero ahora lo soy más. Estoy en un rol en que, si mis actuaciones son vistas como parte de una estrategia que tiene otros propósitos y no el mandato que me toca como ministra del Interior, va a debilitar la tarea que tengo que hacer y la puede llegar a volver imposible. Por eso soy tan radical”.
Pero no todo es trabajo y pese a lo demandante de su cargo, Tohá contó que “lo que más me sirve es querer la vida y tener gratitud por lo que a uno le ha tocado, a pesar de las cosas difíciles. Me busco espacios y trato de mantener la actividad física. Creo que es la clave de estar sana de cabeza y de energía, aunque eso signifique sacrificar algunos de los pocos minutos de sueño que tengo. Vale la pena”.
PUBLICIDAD
La Ministra gusta de pasarlo bien y no lo niega, se reconoce como “totalmente gozadora, en todo sentido. Me gusta comer cosas ricas, cocinar, ir a la playa, pasear, ver películas, leer… aunque ahora no tengo nada de tiempo, me quedo dormida con las películas y los libros. Pero me gusta”.
Finalmente contó que con sus hijos se rieron mucho por los memes que dejó su interpelación por parte del diputado Andrés Longton en el Congreso, en donde ella aparecía parada con la mano en la cintura, “fue muy divertido, mis hijos se rieron mucho. Además, con el diputado Longton nos saludamos ese día y dijimos ‘ojalá hagamos algo bueno, pero en todo caso vamos a producir muchos memes”.