La diputada María Luisa Cordero realizó una férrea defensa médica a su colega Gaspar Rivas, quien protagonizó un bochornoso momento esta semana, al insultar con garabatos de grueso calibre a dos parlamentarios durante una comisión en el Congreso. Ante esto, la doctora pidió compasión porque, a su entender, tendría un trastorno similar al que sufría Agustín Arenas, el hombre que se hizo conocido como “Súper Taldo”, por decir garabatos de manera descontrolada.
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“Lo que pasa es que Gaspar tiene un trastorno obsesivo-compulsivo y además tiene un cuadro depresivo. Yo hablé con Gaspar y le dije que de repente tiene una conducta... él tiene un TOC gravísimo, yo sé como tiene las manos de tanto que se las lava”, reveló la psiquiatra, aclarando que “lo estoy diciendo para que lo dejen de joder”, consignó La Cuarta.
Además, explicó que el síndrome lo hace hablar de manera descontrolada, tal como lo hizo Arenas en la mítica entrevista que le realizó Bernardo de la Maza el año 1974.
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“Tiene un síndrome de Gilles de la Tourette”
“Cuando él está con la ansiedad, le da por decir garabatos. Él tiene un síndrome de Gilles de la Tourette. El Gilles de la Tourette significa decir garabatos y tener pensamientos obscenos en la cabeza. Lean un poquito, está hasta en Google”.
Incluso, Cordero contó en el programa Sentido Común los consjeos que le dio cuando tuviera ganas de insultar a la gente.
“No es loco, tiene un trastorno obsesivo-compulsivo, el mismo que dicen que tiene el Presidente. Yo hablé con él y le dije que, cuando te le den ganas de salir garabatos, salga al baño, vaya al auto y diga todos los garabatos”, agregó.
Finalmente, la diputada pidió que “hay que ser más compasivos”, solicitando que “no lo agredan con tanta facilidad” y preguntó qué era peor, una persona con TOC o un parlamentario drogadicto.
“Hay peores personas en el hemiciclo que pasan desapercibidas. Todos los drogadictos que se lavaron durante cuatro semanas el pelo para que les salga negativo. ¿Qué es peor? ¿Un TOC o los drogadictos?”, cerró.
