Los “loteos brujos” son un tipo de estafa donde personas, o un grupo de personas organizadas, subdividen ilegalmente un terreno y los delimitan con dimensiones menores a lo establecido en el Decreto de Ley 2.695.
“Efectivamente, el decreto permite regularizar e inscribir en el Conservador de Bienes Raíces, puede que nunca puedan regularizarse, tal como ocurre con los terrenos agrícolas, que conforme al Decreto Ley 3.516 no se pueden subdividir por menos de 5000 metros cuadrados. No obstante lo anterior, algunas personas, a veces inescrupulosamente o derechamente por ignorancia, prometen terrenos agrícolas menores a 5.000 mt2,” afirma Miguel Toro, abogado inmobiliario de MTC abogados.
Ahora bien, este suceso no siempre se realiza para estafar,”sino más bien con la intención o esperanza de que estas subdivisiones en algún momento puedan inscribirse regularizando el inmueble a través de bienes nacionales, en conformidad a lo dispuesto en DL 2.695 del año 1979, tras haber poseído el terreno por a lo menos cinco años”, explica Miguel Toro.
Por otra parte, en la misma línea de fraudes inmobiliarios, dentro de las estafas más frecuentes están los vendedores sin terreno. Se trata de grupos organizados que buscan propiedades baldías o no habitadas por sus dueños y ofrecen estos lugares como propios, poniéndolos en venta, falsificando certificados, contratos firmados por supuestas instituciones para lograr concretar la venta.
En el caso de tener la intención de invertir en inmobiliaria, el abogado recomienda los siguientes puntos:
- Pedir visita al inmueble para conocer el estado real en que se encuentra
- Si se exigen pagos, evitar que sean mediante transferencia electrónica, idealmente mediante vale vista o depósito a plazo endosable.
- De ser posible, invertir en un estudio de títulos
- Solicitar asesoría especializada de un abogado inmobiliario para revisar la documentación del inmueble
Este tipo de información se puede obtener de la página de la Dirección de Obras Municipales (DOM), la que además proporciona información de permisos de edificación, urbanización, regularizaciones, entre otras, así podrá evitar una posible estafa y el robo de una gran inversión.