Haciéndose cargo de los sinsabores que dejó la presentación del plan de recuperación Chile Apoya, y de las presiones por habilitar un quinto retiro del 10%, el Gobierno entró a la ofensiva e ingresó un proyecto alternativo que permite acceder a fondos previsionales de manera excepcional bajo seis causales.
El texto de 23 páginas establece que podrá “realizarse dicho retiro para exigir el pago de deudas originadas por obligaciones alimentarias; para el pago de deudas con instituciones de salud; para incrementar el ahorro necesario para la postulación a los subsidios a la adquisición de la primera vivienda; con el objeto de pagar deudas hipotecarias (primera vivienda) de hasta 4.000 UF contraídas hasta el 31 de marzo de 2022; para el pago de deudas de servicios básicos no cubiertas por los subsidios; y para hacer frente a deudas financieras, bancarias y no bancarias, contratadas también hasta el 31 de marzo de 2022.
La fórmula ingresó con discusión inmediata y aunque varios sectores, especialmente de oposición, expresaron reparos, la Comisión de Trabajo de la Cámara lo dejó casi íntegramente despachado a Sala. Falta la revisión del artículo 1, que enumera las causales para retirar, pues se espera el ingreso de indicaciones.
En medio de la misma sesión, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, precisó que los beneficiarios llegarían a más de cuatro millones de personas.
Por conceptos de deudas financieras, dijo, habría unos tres millones de ciudadanos que podrían acceder, un millón para el pago de deudas de servicios básicos y 70 mil familias que podrían recibir dineros bajo la causal de las deudas de pensiones alimenticias.
“Si uno toma estas cifras y las cruza con los saldos en cuentas de ahorro individual, esto podría significar un uso de US$ 3 mil millones. Eso es la quinta parte de un retiro tal como lo hemos conocido hasta ahora”, detalló el secretario de Estado.
Además, hizo presente que, como no hay consumo involucrado, pues los dineros no pasarán por las personas ni podrán destinarse a otros fines, la idea “no tiene efectos en la inflación”.
Por lo mismo, parlamentarios oficialistas celebraron. “Este proyecto hace viable un verdadero quinto retiro, que nos permita generar las posibilidades de que las personas tengan acceso a sus recursos para pagar deudas, tener acceso a aquellos recursos que necesitan para resolver algunos de sus problemas más urgentes”, destacó Karol Cariola.
Sin embargo, no todos en el sector quedaron conformes. De hecho, el alcalde Daniel Jadue volvió a arremeter contra la administración de Boric (ver cuña abajo).
Jackson ofrece ley para ponerle llave a los fondos previsionales
Pese al proyecto alternativo que ingresó el Gobierno, un grupo de parlamentarios insiste en que hay que darle luz verde al quinto retiro del 10%.
Y entre ellos, varios argumentan que lo impulsan por el temor de que la administración de Gabriel Boric o la Convención expropie esos dineros.
En reiteradas ocasiones el Ejecutivo ha dicho que esa no es una posibilidad que evalúen, pero previo a la votación del quinto retiro, el titular de la Segpres, Giorgio Jackson, ofreció presentar, “la próxima semana si es necesario”, un proyecto de ley que dé tranquilidad y certezas a la derecha de que esos dineros son de propiedad de los trabajadores.
La declaración no fue suficiente, pues, por ejemplo, Gonzalo de la Carrera le pidió ir más allá e intervenir en el trabajo de la Convención para que repliquen la acción, a lo que Jackson rápidamente se negó.
Como sea, la Comisión finalmente determinó rechazar en general la iniciativa del nuevo 10%, con 5 votos a favor, 4 en contra y 1 abstención.
Y dado que se prevé que el destino del proyecto en la Sala será el mismo, René Alinco (IND-PPD) presentó una nueva propuesta. “Lo que presentó el Ejecutivo es muy insuficiente”, dijo Rubén Oyarzo, que firmó la moción.