Antonia Guerrero fue una de las jóvenes que esta semana visitó La Moneda por formar parte del selecto grupo de adolescentes que obtuvo un puntaje nacional en la Prueba de Transición Universitaria (PTU o PDT).
Ya en la casa de Gobierno, la joven puentealtina había destacado al declarar que padecía de Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), una enfermedad mental que no le impidió conseguir el logro académico que le permitirá estudiar medicina, una carrera que aseguró abrazar gracias al ejemplo que vio en el presidente electo, Gabriel Boric, uno de los tantos chilenos que padece el trastorno de Guerrero.
El modelo de Antonia
Sus dichos los reafirmó en entrevista con radio ADN, donde puso de ejemplo al parlamentario como un referente para decidirse a estudiar medicina, sin temores de que su trastorno sea un impedimento al momento de realizar alguna cirugía.
“Yo en algún momento me pregunté: ¿podré ser médico con TOC? ¿Qué pasa si estoy en una cirugía y me viene un pensamiento intrusivo? ¿O si tengo 10 casos y me obsesiono con uno? Dudé si dedicarme a esto. Luego salió Gabriel Boric Presidente y él tenía TOC. Lo que me inspiró fue que él tuviera TOC”, dijo la joven, quien encontró la pronta respuesta del aludido, quien en sus redes sociales agradeció el gesto de la estudiante nacional.
“Un honor, Antonia. Qué importante es que avancemos es derribar los estigmas que hay sobre salud mental”, publicó Boric en su cuenta de Twitter, donde además valoró que en estos tiempos se pueda hablar sin problemas de este trastorno. “(Es bueno que) podamos hablar de ella con naturalidad y empatía”, expresó el futuro presidente quien sobre el final de su posteo le mandó “un abrazo” a la joven.
La publicación de agradecimientos del parlamentario a la joven Antonia tuvo varios comentarios de usuarios en redes sociales, quienes valoraron la apertura a la conversación respecto del TOC y, en algunos casos, fueron explícitos en pedirle al próximo jefe de Estado que relevara “la problemática de las deficiencias en la salud mental en Chile”, para “comenzar lineamientos para subsanar la epidemia de salud mental evidente en Chile”.