El Instituto de Salud Pública de Chile (ISP) está evaluando el registro sanitario del medicamento de origen argentino Convupidiol, que se basa en el cannabidiol (CBD), una sustancia que se encuentra en la cannabis sativa.
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El Convupidiol es usado en el tratamiento de niños con epilepsia refractaria, aquella en la que persisten las crisis a pesar de recibir tratamiento con al menos dos o tres fármacos.
Como el Convupidiol se basa en el CBD, no es psicoactivo y tiene un alcance médico más amplio.
Por ello, por ejemplo, en octubre de 2020 fue autorizado su uso en Argentina por la agencia regulatoria de dicho país, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
Desde ese fecha, el Convupiodiol se distribuye con éxito en Argentina en los niveles sanitarios privado y público, con foco especial en el Hospital de Referencia Pediátrico Garrahan, de Buenos Aires.
La experiencia chilena con el medicamento
En nuestro país, hay algunos pediatras chilenos que ya han empleado este producto, importándolo con el objetivo de administrarlo con uso compasivo en sus pacientes.
Fue el pasado 7 de septiembre cuando el ISP declaró admisibles los antecedentes presentados el 25 de julio de este año por la Comercializadora Pharmacosante para el medicamento Convupidiol, procedente del Laboratorio Alef Medical Argentina.
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Convupidiol es obtenido de las partes aéreas de la cannabis sativa, y su fabricación contempla buenas prácticas de manufactura y variados controles sanitarios.
Su solución oral es ocupada para tratar convulsiones asociadas al síndrome de Lennox-Gastaut o al síndrome de Dravet en niños mayores de dos años.
También se le ocupa en otros países para tratar la esclerosis tuberosa, un trastorno genético poco frecuente que hace que se formen tumores no cancerosos en muchas partes del cuerpo.
A diferencia de los productos caseros hechos con marihuana y de otros importados que no cuentan con autorización sanitaria en ninguna parte del mundo, Convupidiol contiene un 99,6% de CBD y solo trazas del 0,014% de tetrahidrocannabinol o THC, el subproducto psicoativo.
