Un estremecedor drama está viviendo esta semana una familia estadounidense luego que el pasado lunes su hijo de dos años falleciera tras ser atropellado accidentalmente por su padre.
El menor, identificado como Bayron Alexander Zapata, perdió la vida en una desafortunada maniobra de su progenitor, quien antes de salir en reversa con su camioneta pickup, desde una vivienda del condado Fairfax, Virginia, y ubicada en Roma Street, cerca de Alta Vista Drive; no vio al niño descender del automóvil y lo atropelló.
“Yo a él lo metí adentro y le dije que se quedara adentro y me dijo ‘Ok, papi’, pero yo no me di cuenta cuando él volvió a salir”, relató entre lágrimas el padre del menor al Noticiero 44 de la cadena Telemundo. “Ya fue demasiado tarde cuando después pasó lo de la truka (sic)”, explicó.
Según versiones policiales, el accidente se produjo el pasado lunes, a eso de las 19:30 horas de Chile (18:30 horas local).
Alto número de accidentes automovilísticos de menores en EE.UU.
La tragedia fue ampliamente abordada por el noticiario de Telemundo, que en su nota reveló que Bayron estaba a días de cumplir los 3 años y que según su madre, Kelly Castillo, era “un niño alegre. Justamente el domingo fuimos a un río a pasar todo el día con él en familia”.
El más afectado, su padre, sólo atinó a pedirle a los telespectadores que “por favor, cuiden a sus hijos”, antes de volver a quebrarse en pantalla.
La organización “Kids and Cars”, consultada luego del accidente, expuso que en Estados Unidos, a lo menos “50 niños son alcanzados por autos en retroceso cada semana”.
Es por ello que reforzaron las recomendaciones de “instalar cámaras en la parte de atrás de los vehículos, crear como hábito que los niños estén supervisados cada vez que alguien llega o sale de la casa, tener cerraduras en la parte superior de la puerta, caminar completamente alrededor del auto antes de moverlo y si necesita mover el coche con otro adulto, verificar que los niños se alejen a un lugar donde sea posible verlos”.
