La exsubsecretaria de Carabineros y también exministra, Javiera Blanco, fue formalizada hoy por el delito de malversación de caudales públicos, quedando con arraigo nacional y firma mensual.
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El Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago rechazó de esta forma, el sobreseimiento definitivo de la causa.
De esta forma, en una audiencia que duró más de ocho horas, el tribunal acogió los argumentos presentados por la Fiscalía y el CDE.
Se imputó también a los generales retirados, Gustavo González y Bruno Villalobos por malversación de caudales públicos y falsificación de instrumento público. La audiencia de Eduardo Gordón fue reagendada para el 22 de diciembre.
Además fueron formalizados: el exjefe de la Unidad de Intendencia de Carabineros, Flavio Echeverría; el exdirector de finanzas, Iván Whipple y el exjefe de la Dirección de Presupuesto, Héctor Zúñiga, quienes fueron formalizados por cumplir un rol en el manejo de fondos reservados.
De acuerdo a los antecedentes, los delitos habrían sido efectuados mientras la abogada era subsecretaria de Carabineros, durante el primer gobierno de Michelle Bachelet. Período, en el que habría recibido $42.132.000. Esto a través de cinco mil movimientos bancarios, que se llevarían a cabo mediante ocho depósitos entre 2006 y 2007.
Según dijo la fiscal Chong la imputada Mónica Javiera Blanco se desempeñó como subsecretaria de Carabineros y “durante el periodo que comprende su gestión, entre septiembre de de 2006 y marzo de 2010, concertada con los generales directores José Bernales Ramírez y Eduardo Gordon Valcarce, se apropió directa y personalmente de caudales públicos provenientes de gastos reservados de Carabineros en moneda nacional, con pleno conocimiento de que no le correspondía recibir esas sumas”.
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En el capítulo de “sustracción de los fondos públicos”, la fiscalía señaló que los imputados “sustrajeron y permitieron que se apropiaran o consintieron que otros sustrajeran” gastos reservados. El 41% de esos montos, se destinaron a lo que debían dedicarse originalmente: labores de investigación criminal, drogas e inteligencia. Mientras que el 45% fue sustraído y el 14% restante se destinó a “gastos reservados extraordinarios”, y puesto a disposición de los generales para “uso discrecional”.
El primer registro de montos malversados dataría de 2007, en manos del ya fallecido general José Bernales y se afirmó que de ahí en adelante la sustracción se concretó mediante “la entrega en efectivo a sus destinatarios contenidos en sobres de papel”.
Carabineros recibía todos los años cerca de 500 millones de pesos, sumado a 90 mil dólares para gastos reservados. El modo de operación constaba en que ese dinero se giraba a través de Banco Estado y pasaba a finanzas, donde se realizaba una planilla con todos los nombres y montos a repartir. Luego, se les pasaba sobres con el dinero que tenían acordado.