Sudoración extrema, sensación de agotamiento y hasta debilidad. Durante los días de calor, el cuerpo experimenta cambios a los cuales hay que prestar especial atención. El verano extremo no siempre implica días de disfruta, si no también algunas complicaciones de la salud o malestares.
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Uno de los más comunes además es la hinchazón de los pies. No resulta extraño que ante el aumento de las temperaturas tanto tobillos como pies aumenten su tamaño y también se vean enrojecidos.
¿Cuáles son las causas? No pocos expresan preocupación ante la ola de calor y las temperaturas sofocantes, aunque los expertos explican las causas de estos cambios corporales en esos días en los que aumenta la temperatura.
Los pies suelen hincharse durante los días de verano principalmente por la vasodilatación provocada por el calor, Esto significa que “las venas de la circulación de retorno se agranden y entonces no pueden hacer bien su papel de retorno venoso”, según dijo David Fernández Caballero, experto citado por el portal Rivera Salud.
La acumulación de líquidos entonces suele ocurrir en la parte inferior del cuerpo, agregó. Esto puede ocurrir incluso en las personas sanas o sin ningún tipo de problemas en la circulación sanguínea.
¿Cómo evitar la hinchazón de los pies en verano?
El calor resulta sofocante pero hay ciertas medidas que ayudan a lidiar con él. La hidratación juega un papel muy importante así como evitar la exposición excesiva al sol, especialmente en los horarios de mayor radiación como el mediodía o al comienzo de la tarde.
En caso de notar la hinchazón de sus pies puede recurrir a baños de agua fría. Esta actúa como un vasoconstrictor reduciendo el tamaño de las venas y por tanto, mejore la circulación. También es importante darse masajes con frío, y procurar alimentos refrescantes en estos días de calor.