No cabe duda de que en las redes sociales podemos encontrar, prácticamente, cualquier tipo de contenido.
Desde los retos y bailes de moda, pasando por las bromas y chistes, hasta llegar a las historias de vida que son capaces de dejar con la boca abierta a más de uno.
Tal es el caso de Eduardo Chamé, un joven mexicano que superó las críticas y burlas de algunas personas, que lo señalaron por vender globos.
Joven globero se gradúa como contador
Luego de un arduo trabajo y no detenerse hasta conseguir sus sueños, el chico se graduó como contador.
Y es que con el objetivo de financiar su carrera universitaria, para obtener el título, y pese a las dificultades económicas por las que atravesaba, el chico alcanzó su meta estudiantil.
A “Lalo” no le da pena asegurar que el oficio de globero le ayuda a pagar su profesión, para convertirse en una historia de pasión, tenacidad y pasión.
Fue en las calles del estado de Chiapas, donde Chamé vendía sus globos.
Sin importar los rayos del sol o el duro frío, él cargaba más de 50 globos, con la única idea de que tendría un mejor futuro.
Sufrió bullying
De hecho, en su escuela fue víctima de acoso y discriminación por dedicarse a un empleo callejero.
Lo cierto es que su deseo de superarse pudo más que las burlas, y para muestra está el título que ya cuelga de las paredes de su hogar.
No hay trabajo vergonzoso
“Quiero expresarle a todos aquellos que alguna vez se burlaron de mí, que no hay trabajo vergonzoso, que cuando se quiere salir adelante, uno debe trabajar en lo que sea, los vendedores ambulantes somos personas que también tenemos sueños, que estamos forjando nuestro futuro, por ello hay que respetar y valorar el trabajo por muy humilde que sea, porque más adelante ese vendedor al que hoy rechazas será el profesionista que mañana tú puedas necesitar”, dijo el joven que se graduó de la Licenciatura de Contaduría en la Universidad Autónoma de Chiapas.