No hay nada más delicioso que incluir las mandarinas en nuestra dieta diaria, ya sea complementando un jugo natural o una ensalada de frutas. Pero resulta que también es un excelente aliado de belleza que ayuda a nuestra piel a brillar por completo.
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Es uno de los cítricos favoritos de todos, muy similar a las naranjas. Además es muy saludable, ya que una mandarina aporta tan solo 47 calorías, con 12gr de carbohidratos, aportando además de vitamina C, vitamina A y potasio.
Beneficios de la mandarina en la piel
La mandarina está repleta de antioxidantes, que precisamente protegen la piel de los rayos solares y el envejecimiento prematuro. “La capacidad antioxidante de la vitamina C es conocida por sus efectos beneficiosos sobre la salud de la piel y el corazón, así como por sus propiedades anticancerígenas”, informó el portal Health Line.
La vitamina C también juega un papel fundamental en la producción de colágeno, que mantiene la piel lozana: “El colágeno es la proteína más abundante en el cuerpo. Da estructura, fuerza y estabilidad a los tejidos conectivos, incluida la piel”.
“A medida que envejece, la cantidad de colágeno en su cuerpo disminuye. Sin embargo, la vitamina C promueve la síntesis de colágeno, lo que mejora la cicatrización de heridas y reduce los signos del envejecimiento, como las arrugas”, agregó el artículo.
Mascarillas de mandarina para revitalizar la piel y disminuir las arrugas
Mandarina y avena
Necesitarás:
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1 mandarina
5 cucharadas de avena
5 cucharadas de miel
1 cucharada de aceite de oliva
Mezcla todos los ingredientes junto al jugo de la mandarina, hasta formar una pasta homogénea.
Usa esta mezcla para exfoliar tu cutis durante varios minutos.
Enjuaga con agua fresca. Puedes aplicar esta mascarilla 1 vez por semana para remover impurezas y dejar tu rostro suave.
Mandarina y cúrcuma
Necesitarás:
1 cucharada de polvo de piel de mandarina
Una pizca de cúrcuma
1 cucharada de miel
Mezcla todos los ingredientes hasta tener una pasta consistente.
Puedes aplicarla en el cutis y en el cuello, dejando reposar por máximo 10 minutos.
Retira con agua fresca y usando un limpiador facial suave o agua de rosas.
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