“Entre amigas y copas” es el podcast de Carla Jara, en donde recibió a un viejo amigo y alguien que la vio dar sus primeros pasos en la televisión, el animador José Miguel Viñuela, quien comandaba el mítico programa juvenil “Mekano”.
Inevitablemente recordaron el programa que marcó un antes y un después en su carrera. Al inicio “Mekano” iba sólo los fines de semana, pero después de la salida de Verónica Calabi pasaron a la semana, y el resto fue historias.
Una de las imágenes que mostraron en el podcast fue de la despedida en el Estadio Chile, actualmente conocido como el Estadio Víctor Jara.
“Fue muy bonito, es uno de los recuerdos que tengo grabado en el Estadio Chile y la Playa Las Salinas cuando la gente coreaba mi nombre. Esas son situaciones que no voy a volver a vivir en mi vida, es alucinante”.
Carla Jara recordó cuando fueron a la Feria del Disco de Paseo Ahumada, lo cual calificaron como “una locura”. “No podíamos entrar, después no podíamos salir. Una cantidad de gente, el paseo repleto, no podíamos más”, agregó la animadora.
El fin de “Mekano”
Sin embargo, no todo lo bonito puede durar y Viñuela recordó los últimos días de “Mekano” cuando fue abatido por la competencia de un nuevo programa que se tomaba las tardes en la televisión chilena, “Rojo, fama contra fama”.
“Los ejecutivos del canal nos pusieron psicólogos para enfrentar el fracaso. Eso la gente no lo sabe, pero cuando estábamos marcando 50 puntos durante un mes, dos meses. Teníamos como promedio de 6 a 9 de la noche, 42 puntos. Con 38 era ‘nos está yendo mal’”, comentó el animador.
“El canal nos puso psicólogos para enfrentar el fracaso porque sabían que esto iba a bajar. Nosotros vivíamos en la luna. Fue literal, apareció ‘Rojo’, pasaron unas semanas y bajamos”, contó.
“A mí nunca se me va a olvidar en el Hotel Nilahue, un día 7 de enero, nos sentamos tras terminar el programa llega Alex (Hernández) y nos dice ‘les quiero contar que Rojo hoy día nos sacó la mugre. Promedió 30 y nosotros 7′. Ese día me quería morir".
Con respecto a ese fracaso, José Miguel dijo que eso le golpeó fuertemente y no era muy maduro. “De la mano de la inmadurez, va el ego. En el caso de nosotros, es un enemigo que nos acompaña durante muchos años”, dijo.
“¿Cómo nos desprendemos del ego? Pegándonos un tortazo en el hocico bien fuerte, que nos diga ‘compadre no eres más que nadie, no eres el rey del Olimpo, no eres indispensable, puedes cagar en cualquier momento, te pueden cagar en cualquier momento, hasta aquí nomás llegaste’. Mi ego todavía era muy grande, y ese día se me fue al piso“, cerró Viñuela.