El periodista de TVN, Davor Gjuranovic, recibió una alarmante noticia antes de salir de vacaciones de verano. Durante su chequeo dermatológico anual, todos sus lunares fueron examinados y con el visto bueno, pero una mancha llamó la atención del médico.
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“‘Esa mancha que tienes en la frente tiene toda la cara de ser cáncer (de piel)‘. Yo le respondí: ‘¿cómo va a ser cáncer?’ Uno queda incrédulo. Y me dijo ‘por el brillo, por mi experiencia, esto es cáncer’”, relató el profesional a LUN.
A los días fue a un dermatólogo encólogo, quien le confirmó el diagnóstico, tenía un carcinoma basocelular. Por lo mismo, rápidamente le agendaron una operación para el 11 de marzo.
El médico le señaló que la intervención tenía que realizarse con prontitud debido a que “se pueden tener problemas como que la zona con cáncer tome contacto con el hueso, eventualmente invadir otras partes del organismo y que el cáncer se desparrame”.
“Eso es lo que a uno le asusta. Para mí era una manchita, ni siquiera un lunar, era una manchita pequeña, no me molestaba porque en la cara siempre te salen granos que van y vienen. Pero después de que me examinaron, me fijé que, al salir de la ducha, esta mancha se iluminaba, era un punto rojo, como si tuviera a Venus en mi cara”, explicó Gjuranovic.
“Nunca he sido un irresponsable solar”
Davor Gjuranovic se sometió a un cirugía de Mohs, en la cual se hace una biopsia para revisar los tejidos. En dicho momento, el profesional de 24 horas se enteró que su cáncer tenía “patitas”, por ende, tuvieron que sacar más piel.
“Así que finalmente me sacaron un pedazo de piel de cuatro por dos centímetros, que es un pedazo grande. Me pusieron muchos puntos hacia afuera y también puntos hacia adentro”, contó el periodista. Actualmente, él tiene un parche en su frente para evitar que su cicatriz pigmente, que le llegue el sol, etcétera.
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El comunicador confesó que sintió rabia al enterarse del cáncer de su piel debido a que siempre ha sido cuidadoso, especialmente por venir de la Región de Magallanes en donde existe una especial concientización.
“El cuidado con el sol que tengo yo y que tenemos los magallánicos es extremo, porque la capa de ozono siempre fue tema allá. Siempre he sido consciente del uso del bloqueador, no me gusta ir a la playa, no me gusta tomar sol, siempre ando con lentes, con gorro, entonces me da rabia y me da lata que me haya pasado esta cuestión a mí. Nunca he sido un irresponsable solar”, contó.
“Pero lo importante es que estoy bien, el diagnóstico se hizo a tiempo y ya se fue todo lo malo. Ahora hay que seguir monitoreándose los lunares y cada lesión que aparezca porque esto puede volver".
“Nunca sabe y yo no tengo familia con antecedentes de cáncer, nada. Afortunadamente me lo he tomado con humor, con buen ánimo, nunca me eché para abajo y ya pasó lo peor”, cerró.