Marcela Vacarezza conmovió al revelar uno de los deseos más profundos de su hijo menor, Benjamín Araneda, quien a sus siete años ha compartido con su familia un anhelo que refleja su gran corazón y comprensión del amor familiar.
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En el programa Podemos Hablar, la psicóloga y presentadora contó que Benjamín le expresó, nada menos que, su deseo de tener un hermano menor, así lo consignó Página 7 quien ya tuvo acceso al adelanto del capítulo que se emitirá próximamente. “Me dice: ‘Mamá, quiero tener un hermanito porque quiero ser el mayor, no ser más el concho’”, relató Vacarezza, quien confesó haberse emocionado profundamente con sus palabras.
El pequeño Benjamín, quien fue adoptado por la familia Araneda Vacarezza en 2019, ya comprende en cierta medida lo que significa este proceso. “Él dice que podemos adoptar otro, él ya usa la palabra”, comentó la animadora. “Le pregunté qué es para él adoptar, y me respondió: ‘Elegir a alguien para que sea tu familia, para amarlo siempre’”.
Pese al tierno deseo de su hijo, Vacarezza explicó que la adopción no es una alternativa que estén considerando en este momento. “Ahí me quedo sin palabras, le cambio el tema... pero no, estamos bien. Yo estoy vieja ya, tengo 54 años; empezar a criar es otra energía”, explicó. Aunque reconoció que la llegada de Benjamín les ha “rejuvenecido totalmente”, admitió que “criar de cero es otra cosa”.
En la entrevista, Vacarezza también reflexionó sobre la posibilidad de que Benjamín tenga un hermano biológico del que no tengan conocimiento. “Siempre le digo a Rafael que si supiera que esta mujer tuvo otro hijo, yo me lo llevo, no me cabe duda”, afirmó con convicción. “No hay contacto con ella porque el mismo tribunal te lo impide, pero yo no podría saber que Benji tiene un hermanito por ahí dando vuelta, me muero”, agregó.
Finalmente, la presentadora compartió cómo la experiencia de la adopción transformó su perspectiva. “Uno entiende el amor a los hijos adoptados cuando lo vive”, confesó. “Yo tenía personas conocidas que tenían hijos adoptados, pero para adentro decía: ‘Está bien, se les quiere, pero no me vengan como con cosas’. Es muy especial, es muy curioso, es un regalo, una bendición”, concluyó emocionada.
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